Nueva Delhi, 28 dic (EFE).- La India despidió este sábado con un funeral de Estado al recientemente fallecido ex primer ministro Manmohan Singh, que ejerció como jefe del Gobierno indio entre 2004 y 2014 y es considerado el artífice del 'boom' económico de este país asiático.
Singh murió la noche del pasado jueves a los 92 años en un hospital de Nueva Delhi por complicaciones relacionadas con la edad, según el centro médico, y recibió hoy los máximos honores durante sus últimos ritos, en los que estuvo acompañado por la plana mayor de la política india.
La ceremonia fúnebre tuvo lugar en el Nigambodh Ghat, uno de los crematorios más antiguos de la capital india y que es bañado por las aguas del sagrado río Yamuna.
La elección de este lugar por parte del Gobierno, que también decretó siete días de luto hasta el 1 de enero, vino acompañada de las protestas del opositor Partido del Congreso (INC) -donde militó Singh hasta su muerte-, puesto que esta formación había pedido que la ceremonia se celebrase en un emplazamiento en el que pudiera erigirse posteriormente un memorial en su honor.
Aunque el Gobierno del primer ministro, Narendra Modi, aceptó la propuesta del memorial, afirmó en un comunicado que necesitaba más tiempo para la designación de ese lugar.
Antes, los últimos ritos del exmandatario indio incluyeron una procesión fúnebre, en la que su cadáver estuvo acompañado por cientos de policías a la carrera, entre el crematorio y la sede central del INC, a la que el cuerpo de Singh había sido trasladado esta mañana, según imágenes de la agencia india PTI.
Allí acudieron decenas de sus líderes para despedirse del que es, a día de hoy, el último miembro del partido en haber ejercido como primer ministro.
Entre esas personas se encontraba la carismática Sonia Gandhi, una de las líderes del INC y quien precisamente cedió en 2004 el cargo de primer ministro a Singh, cuando todo parecía indicar que sería ella quien encabezaría el Gobierno tras la victoria de su partido en las elecciones generales.
Este gesto convirtió a Singh, nacido en Punjab Occidental (actual Pakistán) en 1932, en el primer miembro de la minoría religiosa “sij” en ocupar la jefatura del Ejecutivo indio.
El ex primer ministro estuvo al frente del Gobierno durante dos legislaturas que se saldaron de manera distinta: si bien la primera fue un éxito moderado gracias al crecimiento económico y a la salida de la India de su aislamiento nuclear -a través de un pacto con Estados Unidos-, su segundo lustro estuvo marcado por la desaceleración de la economía y varias acusaciones de corrupción en su Ejecutivo.
Singh, economista de profesión, es más recordado por su trayectoria como ministro de Finanzas (1991-1996), cuando introdujo una serie de reformas para liberalizar la economía y facilitar la inversión extranjera que dieron un enorme impulso a la hasta entonces frágil economía india.