Jerusalén, 26 mar (EFE).- Aviones del Ejército israelí bombardearon este martes infraestructura de la milicia chií pro iraní Hizbulá en el área de Zboud, en el noreste del Líbano, en el que es ya el ataque más alejado de la frontera con Israel desde el inicio del fuego cruzado entre ambos países a raíz de la guerra en Gaza, hace más de cinco meses.
“Aviones de combate de las Fuerzas de Defensa de Israel atacaron una zona de aterrizaje y varias estructuras militares dentro de un complejo militar utilizado por la unidad aérea de Hizbulá en el área de Zboud, en el interior del territorio libanés”, informó hoy un comunicado castrense.
Dicha zona se encuentra a unos 170 kilómetros al norte de la línea de demarcación de entre el Líbano e Israel.
Se trata de un ataque en represalia, dice Israel, por los misiles lanzados esta mañana por Hizbulá contra la base aérea israelí en el Monte de Merón, norte de Israel, “que no causaron heridos ni daños en las capacidades de la unidad”, según un comunicado.
Otro complejo militar de la milicia chií y “una infraestructura terrorista” fueron también atacados en Ayta ash Shab y Kfarkela, a escasos kilómetros de la frontera, además de un punto de observación en la zona de Maroun El Ras, en Nabatiye.
Por su parte, Hizbulá reivindicó hoy nueve ataques contra Israel y los Altos del Golán ocupados, con artillería, misiles y cohetes, en los que, según medios árabes, fueron lanzaron más de medio centenar de cohetes.
Entre esos ataques, Hizbulá confirmó haber atacado la base aérea militar israelí el Monte Merón, así como las zonas de Avivim y de Shlomi, entre otras.
La frontera entre Israel y Líbano vive su mayor pico de tensión desde la guerra de 2006, con un intenso intercambio de fuego desde el inicio de la guerra en Gaza que ya se ha cobrado la vida de al menos 345 personas, la mayoría en el lado libanés y en las filas de Hizbulá, que ha confirmado 236 bajas de milicianos, algunas en Siria.
En Israel han muerto 17 personas en el norte (10 militares y 7 civiles); mientras que al otro lado de la frontera han fallecido al menos 328, entre ellos 42 integrantes de milicias palestinas, un soldado libanés y 49 civiles, incluidos diez menores y tres periodistas.
Las hostilidades en la divisoria comenzaron el 8 de octubre, un día después de que estallara la guerra en Gaza tras el ataque de Hamás, como una muestra de solidaridad de Hizbulá con las milicias islamistas palestinas de la Franja, con un cruce del fuego se ha intensificado mucho en las últimas semanas, lo que hace temer una guerra abierta entre las partes.