Izquierda Unida celebra este sábado un acto en Rivas Vaciamadrid que servirá de pistoletazo de salida en la preparación de la carrera electoral para las municipales de mayo. Bajo el lema ‘Cuidamos lo cercano’, la formación liderada por Alberto Garzón reivindicará “el arraigo territorial y su representación institucional repartida a lo largo y ancho del Estado” para defender que es “la organización que más contacto directo y cercano tiene con la ciudadanía en los municipios de todo el Estado dentro del espacio político de la izquierda transformadora”.
Pendiente de las posibles candidaturas de confluencia con Podemos tanto en municipales como autonómicas y en mitad del proceso de conformación de Sumar, el partido intentará trasladar que es “la izquierda reconocible en la que se puede confiar”, para lo que pondrá en valor a los “miles de concejales y concejalas que están dando la cara codo a codo con los vecinos y las vecinas”.
Antes del acto tuvo lugar la Coordinadora Federal de IU, el órgano de dirección que trabaja los Programa Marco tanto para las elecciones autonómicas como municipales. En el caso de este último, el borrador del programa al que ha tenido acceso este periódico contempla un amplio paquete de propuestas económicas, de participación ciudadana y de medidas impositivas. Respecto a estas últimas el documento plantea que “los ayuntamientos carecen, a diferencia de las comunidades autónomas y del Estado, de potestad legislativa para poder crear nuevos impuestos y configurar los existentes”. Y por eso propone reformas concretas.
Izquierda Unida aspira, por ejemplo, a reformar el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) para incluir “una escala progresiva que haga más justo el tributo”, así como revisar y eliminar las exenciones y bonificaciones fiscales que permiten a determinados inmuebles no pagar el IBI, especialmente en el caso de inmuebles de la Iglesia no relacionados con las actividades de culto protegidas por el vigente Concordato con la Iglesia Católica.
En ese sentido, la formación también recoge en su borrados recargar el IBI a las viviendas vacías “con el objeto de incentivar el mercado de viviendas en alquiler, eliminar bonificaciones y exenciones de las que se benefician vehículos de alta gama e incluir criterios medioambientales estableciendo bonificaciones y exenciones a vehículos menos contaminantes para que quien tenga vehículos de lujo, pague proporcionalmente más por ellos. Y crear el impuesto sobre grandes superficies, centros y cadenas comerciales con el objeto de que la recaudación pueda permitir políticas públicas para impulsar y proteger al pequeño comercio”.