Envuelto en una maraña de periodistas, cámaras de televisión, compañeros de partido y curiosos en general, el líder de ERC, Oriol Junqueras, ha vuelto este martes al Congreso de los Diputados rodeado del halo de expectación que habitúa cada vez que pone un pie en Madrid. Poco tienen que ver esta vez las circunstancias de su presencia en la Cámara Baja con las de 2019, cuando acudió al hemiciclo aún estando preso para recoger su acta de diputado y asumir su escaño, que acabó perdiendo poco después.
En realidad, el contraste de esa situación personal de Junqueras se corresponde con el cambio radical que ha vivido el escenario político de Catalunya durante los últimos cuatro años. El líder de ERC, junto al resto de líderes del procès a excepción de Puigdemont, fue indultado por el Gobierno socialista de Pedro Sánchez, que ahora afronta una vuelta de tuerca en su hoja de ruta catalana por la necesidad de los votos independentistas para su investidura.
“Hay que poner justicia donde hay injusticias y hay que ponerla cuanto antes. La amnistía forma parte ya del acuerdo al que llegamos para la mesa”, ha dicho este martes Oriol Junqueras ante los medios de comunicación a las puertas del Congreso y a pocos minutos de que dé comienzo la sesión que acabará habilitando el catalán, junto al euskara y el galego, como lenguas de uso parlamentario.
Sin querer ofrecer detalles de las conversaciones con el PSOE, el exvicepresident de la Generalitat se ha mostrado confiando en todo momento en la predisposición de los socialistas para llevar a cabo una medida que, en su opinión, ya fue pactada para la votación de la Mesa del Congreso aunque no se nombrara de manera explícita. “Una ley de amnistía debe incluir a todos aquellos perseguidos injustamente por hacer algo que no era ilegal, que es un referéndum”, ha comentado.
Junqueras ha lanzado varios dardos a Junts y a Carles Puigdemont, de quienes también depende de la viabilidad de la investidura. “Les damos la bienvenida al ámbito de la negociación y deseamos que se sumen definitivamente a esta vía”, ha expresado tras reprochar que hayan llegado tan tarde a esa vía. “Si nos hubieran apoyado igual podríamos haber conseguido más rápido la salida de la cárcel de gente inocente o la reforma del código penal”.
El líder de los republicanos catalanes ha celebrado que, de ahora en adelante, el Congreso de los Diputados vaya a permitir el uso de lenguas cooficiales como el catalán, el galego o el euskara. “Por primera vez millones de ciudadanos se sentirán representados en su propia lengua. Superamos una anormalidad democrática”, dijo.