Jartum, 4 nov (EFE).- El líder militar sudanés, Abdelfatah al Burhan, ordenó este jueves la liberación de cuatro ministros del Gobierno disuelto que fueron detenidos en el golpe de Estado perpetrado el pasado 25 de octubre, informó la televisión estatal sudanesa.
De acuerdo con la cadena Sudan TV, los ministros cuya liberación fue ordenada son el de Cultura e Información, Hamza Balul; el de Comunicación y Digitalización, Hashem Hasab al Rasul; el de Comercio, Ali Yeddo; y el titular de Juventud y Deporte, Yusuf Adam.
Sin embargo, los miembros del Ejecutivo disuelto que todavía siguen detenidos son el ministro de Asuntos Presidenciales, el de Industria, el asesor de medios del ex primer ministro Abdalá Hamdok, y un miembro del Consejo Soberano, que antes del golpe era el máximo órgano de poder del proceso de transición de Sudán.
Asimismo, también permanecen detenidos otros políticos de las Fuerzas de Libertad y el Cambio, una alianza integrada por una amalgama de partidos políticos, asociaciones y grupos civiles que integraba el anterior Ejecutivo tras haber pactado con los militares una ruta de transición hacia unas elecciones democráticas.
En su última rueda de prensa, el pasado día 26 de octubre, Al Burhan dijo que un comité legal estudiaría la situación de los ministros y políticos detenidos, y que emitiría la decisión de poner en libertad a aquellos contra los que no pesen acusaciones “criminales”.
Pero contra los que se encuentren “evidencias”, de acuerdo con el líder militar, serán mandados a juicio.
La liberación de los detenidos era una de las principales demandas del Gobierno disuelto para sentarse a negociar con los militares que perpetraron el golpe de Estado el pasado día 25.
Otra de las condiciones es “el restablecimiento de todas las instituciones constitucionales” disueltas en la asonada.
Fuentes de la oficina de Al Burhan han revelado a Efe que el general se estaría planteando la formación de un nuevo Consejo de Ministros civil con Hamdok a la cabeza, algo que podría ser anunciado “próximamente”.
El exjefe de Gobierno se encuentra en arresto domiciliario desde el martes, tras haber permanecido 36 horas detenido por los militares, y ha mantenido varias reuniones con embajadores extranjeros, el representante de Naciones Unidas y equipos de mediadores locales e internacionales para buscar una salida a la crisis.
Al Burhan disolvió el pasado día 25 los órganos de gobierno de la transición democrática, creados tras el derrocamiento del dictador Omar al Bashir en abril de 2019, y declaró el estado de emergencia en todo el país.