Meritxell Batet estudiará en las próximas horas si da el paso de competir en las primarias que convocará el PSC para elegir al cabeza de lista por Barcelona. La dirigente catalana, que fue número dos de Pedro Sánchez por Madrid el pasado 20D, podría sustituir así a Carme Chacón, que ha renunciado a repetir como cabeza de cartel el próximo 26 de junio. Según Batet, no había pensado antes en postularse para encabezar la lista por Barcelona y que lo baraja ahora que la exministra ha dado un paso atrás.
“No me he planteado nada al respecto, creo que hay tiempo, no mucho, pero hay tiempo para pensar y me lo voy a tomar, aunque sean unas horas”, ha dicho Batet en los pasillos del Congreso. La diputada catalana ha asegurado que le ha “sorprendido” que la exministra de Defensa haya renunciado, aunque ha evitado valorar su decisión. “Ha tenido muchísima fortaleza, ha aportado mucho al PSOE y al PSC y seguirá aportándolo. Respeto profundamente su decisión”, ha respondido.
La idea de que Batet pelee en las primarias surge del propio Sánchez, que tiene a la dirigente catalana en su círculo de máxima confianza. La colocó en la segunda posición por Madrid para las generales del pasado diciembre, ha ocupado un puesto de especial relevancia en el Comité de Expertos que le asesoró antes de la campaña y ha pertenecido al equipo negociador que ha intentado sin éxito que fuera presidente.
Sánchez y Batet han aparecido juntos en los pasillos del Congreso este jueves cuando el timbre que avisa a los diputados de que comienza la votación ha comenzado a sonar. Ese gesto no ha pasado desapercibido ya que se ha producido apenas unas horas después de que Chacón haya confirmado su paso atrás por “motivos políticos” que no ha querido desvelar.
En la dirección de Sánchez no ocultan que han tenido desavenencias con la exministra desde poco después de que se hiciera con la Secretaría General. En Ferraz sentó muy mal que Chacón amagar “durante mes y medio” con su intención de competir con Sánchez por la candidatura para la presidencia del Gobierno. Los fieles a Sánchez desconfían de la exministra, muy próxima a José Luis Rodríguez Zapatero -enfrentado al secretario general y a quien Chacón le comunicó la intención de su renuncia hace un mes, mientras que a Sánchez se lo dijo este miércoles, apenas horas antes de anunciarlo públicamente- y a quien sitúan alineada con Susana Díaz, la principal rival interna del líder socialista.
Chacón ha atribuido su marcha a “motivos políticos” que no ha querido revelar: “Son cuestión menor en vista de la actual situación política. Me los guardo”, ha señalado. Su entorno ha negado que tenga que ver con la decisión de Miquel Iceta de celebrar primarias para designar al cabeza de lista del PSC.
“Para nada”, respondía en los pasillos del Congreso un diputado de la máxima confianza de Chacón sobre el hecho de que las primarias estuvieran relacionadas con su decisión. “Ha demostrado su compromiso político y ahora se va a dedicar a otras cosas. Está en el equipo de Sánchez y seguirá trabajando. Por ahí no van los tiros”, agregaba ese diputado sobre la posibilidad de que las discrepancias de Chacón con el secretario general estén detrás de su renuncia.
Dirigentes del PSC promovieron la celebración de primarias para designar al cabeza de lista. Detrás de la maniobra estaba la intención de desbancar a la exministra, que está también alejada del primer secretario, Miquel Iceta. La Ejecutiva del PSC se reunirá este viernes para establecer las normas y el calendario para esa votación interna. Por el momento, el exsenador Carles Martí se había postulado para competir y no ocultó que su intención era que Chacón no encabezara la candidatura. No obstante, dejó claro que si había un candidato “mejor” no se presentaría.
Más huecos por Madrid
La renuncia de Chacón y el paso al frente de Batet facilita las cosas a Sánchez. Si la diputada catalana se hace con el número uno de la lista por Barcelona deja libre el segundo puesto por Madrid. Aunque Ferraz ha planteado que no se modifiquen las listas del 20D, ha dejado abierta la puerta a que se puedan plantear cambios por parte de las direcciones regionales por “circunstancias sobrevenidas”.
Uno de los cambios que se baraja en el PSOE es el cabeza de lista por Guadalajara. Pablo Bellido renunció -tras ser elegido por los correspondientes órganos provinciales y regionales- por su imputación en una causa por presunta estafa. El caso se ha archivado. Su lugar lo ocupó Mari Luz Rodríguez, secretaria de Empleo del PSOE, y ese movimiento permitió hacer hueco a Irene Lozano. La marcha de Batet a Barcelona permitiría a Sánchez recolocar a Rodríguez en Madrid sin necesidad de retirar a la exdiputada de UPyD o hacerla retroceder varios puestos.
A pesar de que en las filas socialistas hay voces que piden que Sánchez renuncie a sus dos fichajes -Lozano y la comandante Zaida Cantera-, la decisión de Ferraz de mantener las mismas candidaturas que hace cuatro meses deja claro que su intención no es enmendar lo que muchos califican como un “error”.