Pedro Sánchez ya es presidente tras semanas de negociaciones alrededor de la ley de amnistía que han dejado tocado a su partido. Las estimaciones de voto apuntan a que los socialistas pagan el desgaste y se dejan dos puntos en un mes, mientras el PP de Alberto Núñez Feijóo rentabiliza la campaña contra el pacto con Junts para colocarse con una ventaja de más de cinco puntos. Pero no solo ellos sacan rédito de la situación. La tensión en la calle también ha servido a Vox para frenar en seco su caída y remontar.
El sondeo de noviembre de Simple Lógica para elDiario.es refleja la mayor agitación del tablero político desde las elecciones. El PP se consolida como opción preferida si ahora se celebrasen los comicios, seguido del PSOE. De nuevo se produce una pelea por el tercer puesto en el que Sumar se había asentado en los dos últimos meses. El trabajo de campo de la encuesta se realizó entre el 2 y el 13 de noviembre, en plenas negociaciones del PSOE con Junts y justo antes de la investidura.
La estimación de noviembre señala que si ahora se volviese a votar, el PP sería el partido ganador con el 35,9% de los votos, lo que supone una subida de 1,8 puntos respecto a octubre y 2,8 puntos más que el resultado que obtuvo el 23 de julio, cuando ganó las elecciones con el 33,3% de los apoyos.
El PSOE, por su parte, sufre un importante desgaste por la negociación que ha sido contestada con una movilización constante frente a su sede de Madrid y que ha acabado en escenas de violencia en la mayoría de los días. Los socialistas, una vez revalidado el Gobierno, ven cómo si ahora se repitieran elecciones se quedarían con el 30,3% de los votos. Eso supone una caída de dos puntos en un mes y una bajada de 1,4 puntos respecto a sus resultados de las elecciones generales.
Esos resultados dejan al PP con su mayor ventaja sobre el PSOE desde los comicios. El colchón ha pasado de los 1,4 puntos del 23 de julio a los 5,6 de ahora.
Los resultados del PSOE tienen también un reflejo en la caída de la fidelidad de los votantes, que ahora desciende hasta el 61,3% y le deja con el peor dato de entre los cuatro grandes partidos. Su mayor fuga es hacia la abstención, aunque un 7,3% dicen que ahora se decantarían por el PP. Los populares, por su parte, retienen a la mayor parte de su electorado del 23J, suman ese pequeño porcentaje de votantes socialistas pero, sobre todo, arrastra a casi uno de cada cinco votantes de Vox.
Por debajo la batalla se estrecha. Sumar cae tres décimas y pasa del 12% al 11,7% en un mes, lo que deja al partido de Yolanda Díaz por debajo de sus resultados electorales y alejado de los mejores datos de las últimas entregas. La caída, unida a la remontada de Vox, deja la pelea por la tercera plaza en una sola décima.
La remontada de Vox va en paralelo a su ofensiva en la calle. Tras las elecciones, y con las crisis internas que ha atravesado, el partido de extrema derecha encadenó varios meses de caídas. Ahora, la estrategia de Santiago Abascal de disputar el liderazgo de las movilizaciones al PP parece haber surtido efecto: el partido pasa del 10,7% al 11,6% en un mes, una subida de nueve décimas. Eso sí, Vox sigue aún por debajo de sus resultados electorales, cuando obtuvieron el 12,4% de los votos.
Esos resultados vuelven a provocar que aumente la distancia entre los bloques. La derecha aúna ahora el 47,5% de los votos, frente al 42% de la izquierda. Una diferencia de 5,5 puntos en noviembre, cuando en octubre era de solo seis décimas.
Cae la popularidad de Sánchez y Díaz
El desgaste en la estimación de voto del PSOE también se traduce en una pérdida de popularidad de Pedro Sánchez, que pasa de una valoración positiva del 41,4% al 35,2% y cede la primera plaza por una sola décima. Yolanda Díaz obtiene una valoración positiva de 35,3% de los encuestados aunque también después de una importante bajada, porque en octubre estaba en un 40%.
Alberto Núñez Feijóo sube del 27,7% de valoración positiva al 30%, aunque aún está lejos de pelear por el liderato de esta tabla. Santiago Abascal, pese al impulso de su partido en la estimación de voto, solo logra sumar dos décimas, del 15,6% al 15,8%.