La publicista brasileña Mónica Moura denunció ante la Fiscalía que la constructora Odebrecht, en un acuerdo con el entonces presidente panameño, Ricardo Martinelli, financió ilegalmente la derrotada campaña del candidato José Domingo Arias a sucederle en la jefatura de Estado de Panamá en 2014.
La denuncia fue hecha en la delación que Moura y su marido, Joao Santana, responsables por las campañas electorales ganadoras del Partido de los Trabajadores (PT) en 2006 (con Luiz Inácio Lula da Silva) y 2010 y 2014 (con Dilma Rousseff), hicieron en un acuerdo para colaborar con la Justicia a cambio de reducciones en sus condenas.
Las delaciones fueron divulgadas hoy luego de que el juez instructor en la Corte Suprema del caso por las corruptelas en Petrobras, Edson Fachin, retirara el sigilo de los testimonios.
Según los denunciantes, la mayor parte de los recursos para la campaña electoral que Arias perdió en Panamá fueron pagados ilegalmente por Odebrecht con recursos no declarados y depósitos en el exterior.
Mónica Moura aseguró en su delación que los trabajos de los publicistas brasileños en Panamá fueron intermediados por el director general de Odebrecht en ese país, André Rabello, quien los contactó pidiendo ayuda para el candidato defendido por Martinelli.
Agregó que el propio Martinelli les reforzó la invitación en una reunión que tuvieron cuando asistieron a la ceremonia de posesión presidencial de Danilo Medina en República Dominicana.
Según la publicista, la invitación para hacer la campaña de Arias finalmente fue aceptada cuando el propio Lula se los pidió, en una reunión en la que dijo estar intercediendo para reforzar un deseo de Emilio Odebrecht.
De acuerdo con la denunciante, el valor de la campaña por 21 millones de dólares no declarados fue acordado en una reunión con Martinelli y André Rabello.
En la reunión se acordó que el partido de Martinelli pagaría 4,5 millones de dólares, el entonces presidente medio millón de dólares y Odebrecht 16 millones de dólares.
Moura aseguró que parte del pago de recursos no declarados, por 500.000 dólares, lo recibió directamente de Martinelli en el propio Palacio de las Garzas, y dijo que de dicha campaña quedó una deuda de cerca de 5 millones de dólares que nunca recibieron.
Odebrecht pagó su parte con depósitos en la cuenta de los publicistas en Europa y otros 4,4 millones de dólares a través de una empresa con sede en Perú (Isagon).
Santana y Moura fueron detenidos en febrero de 2016 al desembarcar en Brasil procedentes de la República Dominicana, donde trabajaban para la campaña electoral del presidente Danilo Medina, quien buscaba la reelección.
Los dos fueron condenados a ocho años de prisión por su participación en la trama de corruptelas en Petrobras, aunque pactaron con el Ministerio Público destapar la red de desvíos a cambio de una rebaja en su condena.
Además de las campañas electorales victoriosas en Brasil y de las mencionadas en El Salvador, Panamá y Angola, el matrimonio Santana-Moura también trabajó para la campaña del argentino Eduardo Duhalde (1999), del dominicano Danilo Medina (2011) y la última campaña del fallecido presidente venezolano Hugo Chávez (2012).