El Parlamento ha arrastrado a Grecia a unas elecciones anticipadas que, según las encuestas, podrían poner fin a 40 años de Gobiernos controlados por los conservadores de Nueva Democracia y los socialistas del Pasok. El candidato a presidente de la República, Stavros Dimas, no ha logrado el apoyo de la Cámara para alcanzar la jefatura del Estado en la tercera y última votación, obligando así al país a celebrar elecciones generales anticipadas en un mes.
Tal y como ocurrió en la segunda votación celebrada el pasado martes, el candidato respaldado por el Gobierno de Andonis Samaras solo ha logrado el apoyo de 168 de los 180 diputados que necesitaba para alcanzar la presidencia de la República.
En su primera comparecencia tras la votación, Samaras ha adelantado que se reunirá este martes con el presidente actual, Karolos Papoulias, y pedirá la disolución del Parlamento. La Constitución establece un plazo de diez días para la disolución del Parlamento y la convocatoria de elecciones generales entre tres y cuatro semanas después, esto es, entre el 25 de enero y el 1 de febrero, pero el primer ministro se ha mostrado partidario de la primera opción.
“Hicimos todo lo que pudimos para elegir un presidente y evitar elecciones anticipadas que la mayoría de los griegos no quieren”, ha asegurado Samaras.
El primer ministro advirtió este pasado sábado que quien no respaldase al ex comisario europeo y varias veces ministro griego Dimas, de 73 años, estaría aliándose con la oposición, que encabeza Syriza.
Las filtraciones desde la jefatura de Gobierno y de las sedes de los dos partidos gubernamentales ya apuntaban a que había pocas expectativas de que Dimas lograse reunir los votos necesarios, por lo que la maquinaria electoral ya se ha puesto en marcha.
Según un sondeo divulgado después de que el Gobierno no consiguiera mayoría para nombrar al nuevo presidente en la primera votación, Syriza se impondría en los comicios con un 24,2% de los votos. La gobernante Nueva Democracia (ND) obtendría un 21%. Potami (5,6%), Pasok (5,5%), Partido Comunista (5%) y el ultraderechista Amanecer Dorado (4,5%) les seguirían en intención de voto.
Syriza ya se había convertido en las elecciones europeas en el partido más votado de Grecia, con un 26,5% de los votos.
La Bolsa de Atenas se deja un 11%
El índice selectivo de la Bolsa de Atenas ha llegado a caer un 11,11% tras confirmarse que Dimas no lograba reunir los apoyos necesarios en el Parlamento para su elección como presidente. De este modo, en lo que va de año 2014, la Bolsa de Atenas se ha dejado casi un 34% de su valor.
La incertidumbre política se trasladaba también al mercado secundario de deuda, donde el interés del bono griego a diez años escalaba hasta el 8,625% desde el 8,499% de la apertura.
Asimismo, como viene siendo habitual desde que se inició al proceso de elección presidencial en el Parlamento heleno, el interés del bono griego a tres años se mantiene por encima del ofrecido por la deuda a diez años, situándose cerca del 11%.
El resultado de la votación del Parlamento griego se ha traducido también en pérdidas notables en otras plazas bursátiles del Viejo Continente, con el Ibex 35 bajando un 2,4%, mientras que el selectivo de la Bolsa de Milán caía casi un 3%.