Pedro Sánchez mantiene la tensión con el PSOE de Aragón y Andalucía por las listas hasta el último minuto

La elaboración de las listas en el PSOE evidencia que las rencillas tras la guerra interna de hace dos años no han desaparecido. El último foco de conflicto se está viviendo en la elaboración de las listas electorales, en las que la dirección de Pedro Sánchez quiere meter mano, especialmente para configurar grupos parlamentarios a su medida en el Congreso y el Senado. Ferraz mantiene la tensión con las federaciones de Susana Díaz y Javier Lambán hasta el último minuto.

Los socialistas se acercan al paso final en la confección de las candidaturas, que quedarán formalmente aprobadas en el Comité Federal que se celebra este domingo en Madrid. A lo largo de este jueves se ha reunido la Comisión Federal de Listas para analizar las propuestas que han realizado las distintas federaciones junto a los secretarios de Organización. La mayoría de esos encuentros han acabado con el cierre de las candidaturas, pero en los casos de Andalucía y Aragón sigue habiendo listas “en discusión”.

Las federaciones de Díaz y Lambán mantuvieron el pulso a la dirección de Sánchez al desoír algunas de las directrices que les había hecho llegar. La última palabra la tiene Ferraz, que no dudará en imponer cambios en algunas circunscripciones, tal y como le permite las reglas del partido. Los secretarios de Organización de ambas comunidades llegaron a la reunión con el ánimo de llegar a “acuerdos” y conscientes de que la decisión final será la que tome Sánchez.

En Andalucía, Ferraz quiere laminar a Antonio Pradas como número dos de la lista a pesar de que fue el más votado por los militantes. En la retina del actual inquilino de Moncloa está su llegada a la sede del PSOE hace tres años con las firmas de dimisiones de miembros de la Ejecutiva que pretendían forzar su caída. La negociación en los últimos días se ha centrado en buscarle la salida del Senado, pero de momento no hay nada cerrado, según fuentes de Ferraz. La Comisión Federal de Listas prevé tomar formalmente la decisión este viernes.

En el lugar de Pradas, Ferraz quiere colocar a Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, histórico rival de Susana Díaz y actual delegado del Gobierno en la comunidad, a quien los de Díaz situaron en el cuarto puesto. La salida de Pradas abriría, además, un hueco para Paco Salazar, otro de los hombres fuertes de Sánchez y actual director de Análisis en Moncloa. La magnitud de los cambios y si afecta a otros puestos de la candidatura se conocerá previsiblemente este viernes. Andalucía asegura que acatará la decisión de Ferraz.

Otros focos de conflicto son Córdoba, donde Sánchez baraja llevar a la número tres de Díaz en el PSOE a la Cámara Alta, aunque la propuesta de la federación andaluza es que ocupe el segundo puesto al Congreso. También están en “discusión” Almería y Cádiz. En la primera provincia, Sánchez quiere garantizar un escaño en el Senado a Fernando Martínez, director general de Memoria Histórica; y, en la segunda, fulminar a Juan Carlos Ruiz, dirigente provincial, del tercer puesto.

A última hora de este jueves mantuvieron una reunión el secretario de Organización, José Luis Ábalos, y su homólogo andaluz, Juan Cornejo, para abordar la cuestión. En el PSOE andaluz insistieron en su voluntad de “entendimiento” a partir de ese momento y dieron por hecho que asumirían la decisión de la dirección. Fuentes de Ferraz apuntaron a que los cambios están aún por cerrar de forma definitiva y que se harían de forma global, aunque apuntaron a su voluntad de mostrar un “equilibrio” entre sus intereses y los de la dirección de Díaz. 

También estaba abierta la negociación en Aragón, donde Ferraz ha mostrado su disconformidad con la designación de Ignacio Urquizu como cabeza de lista por Teruel. Fuentes socialistas informan de que una de las soluciones que está sobre la mesa es enviarle a las Cortes regionales para el 26 de mayo y situar como cabeza de lista a un actual diputado regional. También está abierta la candidatura al Senado por esa provincia.

Fuentes de Ferraz aseguran que Urquizu saltará de la lista -también en el PSOE aragonés lo dan por hecho-, al igual que el actual diputado por Zaragoza, Óscar Galeano. En su lugar Sánchez quiere imponer a Pau Marí-Klose, actual Alto Comisionado para la lucha contra la pobreza infantil.

Gran renovación en el Parlamento Europeo

Hasta el domingo también estarán en vilo los aspirantes a tener un hueco en la lista del PSOE al Parlamento Europeo, en la que habrá una importante renovación. A Josep Borrell le seguirá con casi total seguridad la actual portavoz en Bruselas, Iratxe García. Otros asientos garantizados serán para los catalanes Javi López y Laura Ballarín, designados por el PSC, así como la eurodiputada Eider Gardiazabal, del partido en Euskadi. El fichaje estrella de Sánchez para uno de los puestos destacados es el del politólogo Sami Naïr, tal y como adelantó en enero eldiario.es.

Algunos europarlamentarios, como Enrique Guerrero y Ramón Jáuregui, anunciaron su adiós y Sergio Gutiérrez abandona la Eurocámara para encabezar la candidatura al Congreso por Toledo. Está pendiente el otrora poderoso José Blanco: la decisión sobre su permanencia en la lista está en el aire. También el asturiano Jonás Fernández puede saltar de la candidatura. 

La que se da por segura es la salida de Elena Valenciano, que encabezó la candidatura en 2014, cuando Alfredo Pérez Rubalcaba lideraba el PSOE. En el PSPV dan por segura la candidatura de Inmaculada Rodríguez Piñero y en la federación andaluza, la de Clara Aguilera