Quito, 15 dic (EFE).- Los presidentes de Ecuador, el derechista Daniel Noboa, y de Colombia, el izquierdista Gustavo Petro, han acordado este domingo, tras un encuentro en las Islas Galápagos, fortalecer la cooperación fronteriza y la protección ambiental.
Así lo informó la Secretaría General de Comunicación de la Presidencia de Ecuador en un comunicado que resumió el encuentro mantenido este fin de semana por ambos mandatarios en la Isla Santa Cruz, en el corazón de las Galápagos, mil kilómetros al oeste de las costas continentales ecuatorianas.
Petro, que inició el sábado la fugaz visita oficial a Galápagos, por invitación de Noboa, retornará este domingo a su país, según fuentes oficiales colombianas.
Ambos gobernantes han recorrido en Santa Cruz las instalaciones de la Estación Científica 'Charles Darwin' y del Parque Nacional Galápagos, entidad encargada de vigilar y proteger la rica biodiversidad de este archipiélago que cuenta con especies de flora y fauna únicas en el planeta.
Durante una intervención conjunta en la sede del Parque Nacional Galápagos, los dos jefes de Estado han expresado su interés de trabajar conjuntamente en asuntos de la agenda bilateral y regional.
“Debemos ya entender que las necesidades y la compatibilidad de nuestras naciones siempre van a ser mayor que con otras potencias y, si es que nosotros nos juntamos, seremos una potencia imbatible”, aseguró Noboa en su intervención.
Precisó que ambos gobiernos han decidido organizar una “mesa de trabajo” conjunta para empezar a discutir estrategias que permitan cambiar la realidad de la zona fronteriza, sobre todo en la región costera del río Mataje, afectada por el accionar de grupos de delincuencia organizada y el narcotráfico.
“Conversamos sobre Mataje. Vamos a tener una mesa de trabajo entre nuestros ministerios de Defensa para analizar y tomar la mejor decisión. Al final del día, los beneficiarios deben ser las poblaciones que están ahí” asentadas, señaló el mandatario ecuatoriano.
La zona del Mataje, en la frontera continental de ambos países, es un lugar “de cruce de economías ilegales”, recordó Petro tras enfatizar en que lo que se busca es que esa se convierta en una zona para “el cruce de economías lícitas”.
Petro recordó que ambos países son ricos en producción agrícola y puso como ejemplo el café y el cacao que se cultivan en Colombia y Ecuador, productos que gozan de gran acogida en los mercados mundiales.
El impulso de estos objetivos podría articular la lucha de ambos países contra el narcotráfico, uno de los flagelos que azota a ambos lados de la frontera y que tiene repercusiones regionales, añadió el colombiano.
“Las tensiones sociales y políticas serán inmensas, pero América Latina tiene que unirse” para salir adelante, afirmó Petro que no dudó en reiterar que Latinoamérica puede convertirse en “la potencia mundial de la vida”.
Por su parte, la ministra ecuatoriana de Relaciones Exteriores, Gabriela Sommerfeld, anunció que autoridades de ambos países trabajarán en una “hoja de ruta” para ser analizada en la reunión del Gabinete Binacional, programada para los próximos meses.
Esa reunión periódica entre los mandatarios con representantes de sus gabinetes de ministros, es un mecanismo ideado para coordinar, discutir y dar seguimiento a las acciones comunes que se acuerdan en dichos encuentros.
Petro y Noboa no han logrado escapar a la influencia que genera el archipiélago de Galápagos y han hablado también de la necesidad que supone para sus gobiernos el cuidado del medio ambiente.
El presidente Petro expresó su preocupación sobre las proyecciones de aumento de la temperatura en la región para el año 2030, estimadas en las últimas reuniones de la COP-16 y COP-29, que alertan de un incremento del 15 por ciento en las emisiones de dióxido de carbono.
“Esto significa una catástrofe, no solo para la vida natural sino para nosotros mismos, y sobre todo para los pueblos que vivimos al sur, porque tiene un efecto social diferencial”, ya que “entre más pobres, más efectos tiene”, advirtió el mandatario colombiano.
Noboa por su parte, destacó los niveles de cooperación entre Ecuador y Colombia y agradeció a Petro por haber apoyado a su país con la venta de energía eléctrica, en medio de la crisis de generación que ha afectado a Ecuador en los últimos meses y que ha derivado en la aplicación de prolongados apagones a escala nacional.
“Siempre estaremos agradecidos y es una lección importante de cómo debemos como región estar interconectados en materia energética”, apostilló Noboa.