Podemos consultará a sus bases la estrategia de alianzas ante las generales coincidiendo con sus primarias, cuya votación concluye comienza este viernes y concluye el 22 de julio. Y esta será la pregunta formulada a todos los inscritos en Podemos (376.000) y que se responde vía online:
“¿Aceptas que el Consejo Ciudadano de Podemos, en aras de seguir avanzando en la construcción de una candidatura popular y ciudadana, establezca acuerdos con distintos actores políticos y de la sociedad civil siempre que 1) los acuerdos se establezcan a escala territorial (nunca superior a la autonómica) 2) se mantengan siempre el logotipo y el nombre de Podemos en el primer lugar de la papeleta electoral incluso si eso implica concurrir a las elecciones generales en algunos territorios con fórmulas de alianza (Podemos-X)?”.
Es decir, se somete a votación la política de confluencia marcada por la dirección, pero no se da opción a plantear otra. Por ejemplo, no se vota la posibilidad de reformular una marca de confluencia, ni si se quiere o no confluencia a “escala estatal”. Una escala que sí ha servido a Podemos para plantear el reglamento de primarias como circunscripción única y a Iglesias su propia lista.
El sí avala la estrategia de la dirección. El no sirve tanto para el que desee una confluencia mayor como para el que no quiera confluencia alguna.
Así lo ha anunciado en twitter Pablo Iglesias esta mañana:
Podemos consulta a sus bases los acuerdos firmados, tal y como figura en sus estatutos, pero ahora se preguntará por “acuerdos no firmados” con vistas en las elecciones generales.
El partido de Pablo Iglesias lleva semanas siendo interpelado por diferentes espacios políticos y sociales para que se abra a una candidatura de unidad popular para las elecciones. Sin embargo, Podemos, que está ultimando el acuerdo de confluencia para las elecciones catalanas (Catalunya, Sí se Puede, con ICV, EUiA y Procés Constituent), se ha mostrado a menudo refractario a a hacerlo en el ámbito estatal.
El propio Iglesias llegó a calificar de “chantaje” este sábado la invitación a la confluencia de plataformas ciudadanas como Ahora en Común, a la que sí se han sumado cargos de Podemos, de IU, Equo, Convocatoria por Madrid e integrantes en candidaturas ciudadanas municipales. Unos términos que ya rebajó Nacho Álvarez, responsable económico de Podemos, este martes: “No consideramos que se esté haciendo un chantaje, lo que se está haciendo es un emplazamiento público”.
Hace una semana nació públicamente Ahora en Común, una plataforma ciudadana de “una marea confluyente para ganar las elecciones que tiende la mano a las personas que participan en diferentes formaciones para construir el cambio”. Supone un llamamiento a la confluencia inspirado en las experiencias de Ahora Madrid y los en Común (Barcelona en Comú, Zaragoza en Común, Ferrol en Común…). Y lo realizan miembros de la sociedad civil, participantes de candidaturas municipales de confluencia y, también, cargos y dirigentes intermedios de Podemos, Izquierda Unida y Equo.
Entre los impulsores se aprecia que hay personas de candidaturas de confluencia ciudadanas, sectores diversos de Podemos –algunos participantes de Abriendo Podemos y Podemos es Participación–, activistas del 15M, de la autonomía, cargos intermedios de IU y Equo, personas de la cultura y de la universidad. Ya han recogido más de 24.000 firmas.
Y este mismo lunes se conoció el manifiesto “Mover ficha por la unidad popular”, firmado por 121 personas de la cultura, como, Emma Suárez, Juan Diego Botto, Vicky Peña, Alberto San Juan, Rosa María Sardá, Nacho Vegas, Cecilia Roth y Pedro Almodóvar, entre otros: “Mover ficha de forma audaz pasa hoy por apostar por la unidad popular”.
Ante la posibilidad de desborde político y social frente a la estrategia marcada por Podemos en Vistalegre –concurrir en las generales con su nombre y logo– y por sus dirigentes –“la unidad popular es Podemos y pasa por incluir a personas de la sociedad civil en nuestras listas”–, el partido da un paso adelante y busca el refrendo de sus bases a la política marcada por la dirección: posibilidad de acuerdos no superiores al ámbito autonómico y, como mucho con Podemos y un guión (Podemos-X).