La posibilidad de que Arabia Saudí cancele el encargo de unas corbetas que se fabrican en España como represalia por la decisión del Gobierno de parar la venta de bombas guiadas al país del Golfo ha soliviantado a los trabajadores de los astilleros de Cádiz y Ferrol.
La diputada Carmen Valido espera que los astilleros no pierda esos contratos, pero en todo caso ha criticado el hecho de que “un territorio tenga que elegir entre pan y el cumplimiento de la ley”, lo que a su juicio demuestra que “el modelo productivo está completamente agotado”.
Su compañero Juan Antonio Delgado, portavoz de Defensa, ha subrayado que la crisis de los astilleros viene de largo y que el contrato de los buques de Arabia Saudí “no tiene nada que ver” y apenas afecta a un 1,5%. “En los astilleros de Cádiz había 5.000 trabajadores en los años noventa, era la primera industria de la bahía, y hoy no llegan a 1.000, y el PSOE tendrá que decir qué ha hecho en estos 20 años”, ha dicho.
Según los diputados de Podemos, no se debe aceptar “el argumentario” de que, sin las corbetas encargadas, pueden cerrar los astilleros, y cree que los trabajadores “ya saben cuál es la política socialista”.
La apuesta de Podemos pasa por la reindustrialización y por un modelo productivo en el que se puedan diversificar los astilleros con otras actividades, como las energías renovables.