Podemos plantea un programa de regeneración y una reforma fiscal en su censura contra Cifuentes
- Lorena Ruiz-Huerta impugna políticamente en su discurso los triunfos del PP por la corrupción: “No han ganado ni unas elecciones limpiamente”
Regeneración democrática por la corrupción y reforma fiscal que reordene los ingresos. Estos han sido los dos ejes programáticos de la moción de censura presentada por Podemos contra Cristina Cifuentes que este jueves debate la Asamblea de Madrid. La candidata a relevar a la presidenta madrileña, Lorena Ruiz-Huerta, ha justificado la iniciativa en la situación de excepcionalidad por la corrupción del PP de Madrid, pero también en las proyecciones de la “deuda privada” que acumula la región: “En 2019 será superior a los 36.000 millones de euros, el 200% del PIB. Madrid está en riesgo de quiebra técnica”, ha aseverado.
Ruiz-Huerta ha intervenido pasado el mediodía, cuando el debate ya había consumido dos tensas y broncas horas. La intervención del consejero de la Presidencia, Ángel Garrido, tras la presentación de la moción de censura que ha realizado el secretario general de Podemos, Ramón Espinar, ha descuadrado el plan previsto y ha motivado un enfrentamiento por la interpretación del reglamento y ha motivado las intervenciones de otros grupos. Pero solo para discutir de la metodología: tanto Ciudadanos como PSOE han preferido no hacer uso de su palabra durante la mañana aunque podrán hacerlo tras la suspensión de la sesión que seguirá al discurso de la candidata de Podemos.
La portavoz de Podemos en la Asamblea ha desgranado los motivos que han llevado a su grupo a presentar la moción de censura. Ruiz-Huerta ha reconocido que ha sido “la excepcionalidad” de los escándalos de corrupción “que asolan al Gobierno del PP” lo que ha motivado la decisión. “Por responsabilidad ética”, ha señalado.
“El problema de la corrupción es sistémico e invade como una metástasis las instituciones de la Comunidad de Madrid. Forman parte de una organización que ha entrado en las instituciones para saquearla y están dispuestos a todo: cambiar jueces o comprar medios de comunicación. El problema es que su cesto [de manzanas] está podrido”, ha apuntado Ruiz-Huerta. Y ha zanjado: “El PP no ha ganado ni unas elecciones limpiamente”.
Regeneración democrática “para garantizar derechos”
Ruiz-Huerta ha lanzado una batería de medidas de “regeneración democrática” que logre “una nueva institucionalidad para garantizar los derechos de la ciudadanía ante cualquier coyuntura”. Podemos propone una reforma de la Cámara de Cuentas de Madrid para “que ejerza un verdadero control sobre las finanzas”, tanto de las instituciones y empresas públicas como de los partidos y sus fundaciones. “La nueva Cámara debería garantizar su pluralidad e independencia con un nuevo sistema de nombramiento y ampliar su ámbito a sociedades mixtas como el Canal de Isabel II o Arpegio y partidos políticos así como sus fundaciones.
Podemos también quiere reformar la ley de contratos públicos para “ampliar los controles internos en organizaciones que pese a ser pública se rigen por derecho privado”. Además, Ruiz-Huerta ha apostado por “limitar los mandatos” de los gobernantes, “eliminar los aforamientos de los diputados regionales” y “las puertas giratorias de los altos cargos”, “incompatibilizar que alcaldes concejales puedan ser diputados” así como “una fiscalización completa de los partidos”, que deberían abrirse a “primarias para elegir a los candidatos electorales”.
Pero la candidata ha asegurado en la tribuna que ese no es el único motivo para presentar una moción de censura contra Cristina Cifuentes. Y que, si no existieran los casos Gürtel, Lezo, Púnica “o Cifuentes”, tendrían que registrado igualmente ya que, ha asegurado, “Madrid está en riesgo de quiebra técnica”.
Madrid, en “riesgo de quiebra”
La portavoz de Podemos en la Asamblea de Madrid ha resaltado en su discurso que la corrupción no es el único elemento que les ha empujado a presentar la moción de censura. “Creemos que la atención sobre estos gravísimos asuntos no debe eclipsar los problemas endémicos de la Comunidad de Madrid, que van mucho más allá de la corrupción, y que tanto dolor están causando a los madrileños y madrileñas”, ha señalado Ruiz-Huerta.
La candidata de Podemos a presidir el Gobierno regional ha lamentado que el modelo de recaudación fiscal y productivo de la Comunidad, que ha estado gobernada por el PP desde 1995, ponen a Madrid “en riesgo de quiebra”.
“La base del modelo de gestión del Partido Popular, en nuestra Comunidad, es el endeudamiento”, ha señalado. Ruiz-Huerta ha asegurado que la deuda privada que tendrá la región en 2019, cuando concluya la presente legislatura, “será superior a los 36.000 millones”, lo que representa “un 200% del PIB”.
Ruiz-Huerta ha apelado directamente a Cifuentes: “No se atreverá a subir porque no quiere decir quién pagará la deuda cuando el BCE endurezca las condiciones del crédito. No se atreve a dar la cara ante los madrileños para decirle que esa deuda la pagaremos con recortes, empeoramiento de las condiciones laborales y una subida del IVA. Por eso no sube. No porque desprecie la moción de censura, que le produce de todo menos indiferencia”.
La presidenta madrileña efectivamente no ha subido a la tribuna, al menos en la sesión de la mañana, aunque sí ha respondido en los medios de comunicación durante la pausa para comer.
La candidata de Podemos ha propuesto una “amplia reforma fiscal” para que la Comunidad de Madrid no centre “el grueso de su recaudación en el IRPF, que no grava la mayor parte de la riqueza de la región, que no está en las rentas del trabajo sino en activos financieros y patrimoniales” ya que “son los bancos y los grandes tenedores los beneficiados de la política fiscal de su Gobierno”.
“El 10% más rico gana 12 veces más que el 20% que menos lo hace”, ha señalado Ruiz-Huerta. “El 10% de las personas con mayor riqueza poseen 1.200 veces más que el 25% que menos tiene”, ha proseguido, para afirmar: “El grueso queda sin tributar en Madrid. Por eso Madrid necesita una amplia reforma fiscal”.
Dicha reforma “no supone una subida generalizada” de impuestos. Entre las propuestas está “recuperar el impuesto de Patrimonio y uno de Sucesiones y ”exento para la gran mayoría de la población, pero justo para los grandes patrimonios, que huya del dumping fiscal“.
“Equiparemos los impuestos de Transmisiones Patrimoniales a los tipos modales estatales, introduciendo correcciones en función del patrimonio de origen”, ha añadido Ruiz-Huerta, que ha concluido: “Bajemos los impuestos a la mayoría social y subámoselos a los que más tienen”.
Ruiz-Huerta ha cerrado su discurso con una alusión a la corrupción del Canal de Isabel II: “Solo por lo que han hecho con el agua merecen la reprobación. Son indignos de continuar en el Gobierno. En ningún Gobierno. Compraron a dos diputados mafiosos [en referencia al tamayazo] y luego han concurrido dopados a las elecciones. Han pagado sus confetis, fiestas y carteles con dinero negro”.