La Unidad de Coordinación Judicial de la Policía Municipal de Madrid ha identificado ya a tres agentes como posibles autores de delitos de odio y amenazas contra varias personas y colectivos en un chat laboral y continúan las investigaciones para identificar a más responsables de estos hechos, a los que darán traslado a la autoridad judicial.
El inspector jefe del Cuerpo, Teodoro Pérez, ha explicado esta mañana que tuvieron conocimiento de este asunto el 13 de noviembre, cuando un agente llamó a la Unidad diciendo que tenía esta información, por lo que le tomaron declaración, y dieron traslado el martes a la Fiscalía, al Decanato de los Juzgados para reparto (cayó en el Juzgado número 42 de Plaza de Castilla) y a la Unidad de Asuntos Internos de la propia Policía.
“Desde ese día se está actuando y siguiendo con el procedimiento. El viernes estuvo en los Juzgados el agente denunciante para ratificarse en la denuncia planteada y se continuó el procedimiento que el Juzgado ha establecido. En base a eso el Juzgado pidió a la Unidad de Coordinación Judicial que averiguara quién eran las personas que había detrás y ahora hay tres identificados”, ha explicado Pérez. Además, ha informado de que la Unidad de Escolta de Policía Municipal está evaluando si poner protección al denunciante.
El concejal delegado de Seguridad del Ayuntamiento de Madrid, Javier Barbero, ha añadido que la Policía sigue intentando identificar a todos los agentes que pudieran ser encausados y buscando todos los datos, “los que sean precisos”. “La prensa hablaba de media o una docena. Vamos a seguir investigando. No vamos a parar. Es una cuestión que transgrede los mínimos y Policía Municipal lo tiene muy claro y ha actuado desde el primer momento. Vamos a seguir por lo Penal y en Asuntos Internos”, ha advertido.
Posible delito de odio
Según ha detallado el delegado, el Consistorio se ha personado porque un funcionario público ha sido amenazado y estima “que posiblemente haya delitos de odio, porque la responsable máxima de Policía, que es la alcaldesa, ha sido insultada y vejada, y porque se hace un daño muy importante a la imagen del Ayuntamiento y de la Policía Municipal”. “Lo que ha hecho este grupo muy pequeño es algo que no es de recibo, es absolutamente minoritario y no representa el magnífico trabajo del Cuerpo”, ha apuntado.
Barbero se ha mostrado “respetuoso” con los procedimientos abiertos y ha destacado que “no han parado” desde que tuvieron conocimiento de los hechos. “Si ya se han ido identificando supongo que estarán ultimando el inicio del expediente disciplinario y si hay medidas disciplinarias y cautelares informaremos. A mí me preocupa que haya personas con esas actitudes, gente que hace ensalzamiento del nazismo que es capaz de decir que al inmigrante hay que ponerle casquillos en el cráneo y darle con un martillazo. Creo que estas personas no deberían estar trabajando como policías municipales”, ha aseverado.
Por ello, el edil considera que en todos los procesos selectivos de la Policía Municipal “hay que estar muy al tanto de la evaluación de la cuestión actitudinal”. “En los últimos ingresos estamos viendo cómo se puede identificar a través de estudios de psicología social actitudes violentas y autoritarias. Claro que tenemos la responsabilidad en ello, porque no vale todo, porque no sirven todos los perfiles para este trabajo. Si ahora se detecta ese tipo de conductas no es recibo que puedan estar actuando como agentes”, ha apostillado.
Respecto a las puntualizaciones realizadas por algunos sindicatos indicando que este chat es privado y que algunos comentarios han sido descontextualizados, Javier Barbero ha esgrimido que el Código Penal señala que los delitos de odio se pueden dar en el ámbito privado o público, como en las conductas de violencia de género.
“La formalidad podrá ser un elemento importante pero el contenido de los hechos es que vulnera los mínimos de cualquier código ético. El artículo 10 del Código Deontológico de la Policía Municipal dice que el agente como ciudadano, ya no como policía, debe tener un comportamiento ejemplar. ¿Es ejemplar decir que deseamos que Carmena se muera con una muerte lenta? Es una absoluta vergüenza y desde luego no lo vamos a tolerar desde esta Corporación”, ha concluido.