La candidata del PP a la Presidencia de la Comunidad de Madrid y el portavoz de Ciudadanos en la Asamblea, Ignacio Aguado, han firmado hoy el documento de 76 puntos que garantiza el apoyo del partido de Albert Rivera a la aspirante popular en la sesión de investidura del próximo día 24.
El documento ha sido negociado durante las dos últimas semanas por grupos de trabajo de ambas formaciones encabezados por Cifuentes y Aguado y fue cerrado el pasado martes, lo que permitió que ayer la candidata popular pudiera comunicar a la presidenta de la Asamblea, Paloma Adrados, que dispone de la mayoría suficiente para ser investida presidenta.
Cifuentes y Aguado, que ha reconocido que ha habido momentos en los que la negociación a estado a punto del “bloqueo”, han escenificado la firma del acuerdo en la Sala Institucional del parlamento madrileño, donde han firmado sus respectivas copias del pacto, hoja a hoja -lo que les ha llevado varios minutos-, ante una nube de cámaras de televisión y fotógrafos.
Al final son 76 puntos y no los 82 anunciados porque se han unido algunos de la misma materia con una redacción diferente y no porque se hayan suprimido cuestiones, como ha destacado Cifuentes, que ha indicado que 20 son sobre lucha contra la corrupción, transparencia y regeneración democrática, 26 sobre economía y 30 sobre temas sociales.
En el primer apartado se incluyen la realización de una auditoría externa de los ocho últimos años de gobierno regional del PP, la eliminación de aforados, la separen de cualquier cargo público imputado por corrupción, la limitación a dos mandatos, la eliminación del Consejo Consultivo regional y el compromiso con la celebración de primarias.
También el compromiso de “despolitizar” Telemadrid, de lo que se encargará una comisión de trabajo en la que pretenden que también estén el PSOE y Podemos.
En materia económica, donde ambos han destacado la similitud de sus propuestas, han acordado no subir impuestos y no crear otros nuevos, elevar hasta el 2 % del PIB regional las partidas dedicadas a innovación y establecer un plan integral de turismo para poner en valor la marca Madrid, entre otros asuntos.
En cuanto a políticas sociales han incluido preservar el fin social de la vivienda pública para que no se venda más a fondos de inversión, debatir en la Asamblea una ley de servicios esenciales para que no se puedan privatizar servicios públicos, que el Canal de Isabel II no se privatice y sea 100 % de titularidad publica y que siga paralizada la privatización sanitaria.
Asimismo, que se reduzcan un 20 % las cuotas de las guarderías públicas, que se inviertan 30 millones adicionales al año en atención primaria y que se contraten 500 nuevos profesores, especialmente en Secundaria.
La futura presidenta regional ha invitado al resto de grupos parlamentarios -PSOE y Podemos- a que se sumen a un acuerdo en materia de regeneración política, transparencia y lucha contra la corrupción, que a su juicio “sería una buena señala hacia la sociedad”.
Cifuentes ha asegurado sentirse “muy cómoda” con un acuerdo que ha afirmado que le permitirá aplicar “la totalidad” de su programa electoral y ha dicho que “esto no es solamente un pacto obligado por la aritmética parlamentaria sino que en estos tiempos nuevos pactar es algo positivo”.
Ha agradecido la “predisposición” de C's “a que se forme un gobierno que va a posibilitar que se cumpla el mandato de los ciudadanos, que votaron mayoritariamente al Partido Popular aunque sin mayoría suficiente para gobernar en solitario”.
Cristina Cifuentes ha indicado que el grueso de lo acordado son medidas “de legislatura” que se empezarán a aplicar en enero de 2016 con el nuevo presupuesto y, aunque no ha sabido dar una estimación del coste total, ha garantizado que todas tendrán presupuesto porque “esto no es una carta a los reyes magos ni un brindis al sol”.
La medida más urgente de su mandato va a ser la apertura de los comedores escolares para este verano, mientras que otra de sus promesas estrella, el abono joven hasta los 26 años y con una tarifa plana de 20 euros, será “lo antes posible”, ahora si es factible y si no el 1 de enero.
Por su parte, Aguado ha subrayado que se trata de un acuerdo “de investidura”, “puntual” y “a cumplir en los cuatro años de la legislatura”, ha asegurado que “no será un cheque en blanco” y ha dicho que espera que “esto sea el principio de otros acuerdos con el PP y con el resto de grupos”, siempre “desde la centralidad política”.
Una comisión de seguimiento, ha señalado, definirá el calendario y las prioridades y supervisará su cumplimiento de forma trimestral.