No a todo. Ni siquiera a debatir un impuesto extraordinario y temporal a la bancas y las eléctricas, dos de los sectores más beneficiados económicamente en la crisis provocada por la guerra de Ucrania. La portavoz del PP, Cuca Gamarra, ha confirmado este martes que su grupo votará en contra de la admisión a trámite de la proposición de ley presentada conjuntamente por el PSOE y Unidas Podemos “para el establecimiento de gravámenes temporales energético y de entidades de crédito y establecimientos financieros de crédito”.
Gamarra ha rechazado el tributo, cuya entrada en vigor no es inmediata pues debe pasar todo el trámite parlamentario, porque supondría “más dinero en la caja de Pedro Sánchez que no sepamos para qué”. La número dos de Alberto Núñez Feijóo ha insistido en que el PP aceptaría “medidas para bajar los recibos y que los españoles tengan más dinero disponible”. “Pero todas las medidas para que la caja del señor Sánchez tenga más dinero y disponga como quiera del mismo, sin ninguna finalidad concreta, estaremos en contra”, ha añadido, para zanjar: “No puede ser de otra manera”.
El PP votará así en contra de que el Congreso siquiera debata cómo podría implementarse un gravamen excepcional a los beneficios extraordinarios logrados por las empresas eléctricas, así como por los principales bancos. La admisión a trámite de una proposición de ley solo inicia el proceso parlamentario y no deriva obligatoriamente en que la norma sea finalmente aprobada, mucho menos exige el voto final favorable a los partidos que aceptaron iniciar el proceso, que puede demorarse varios meses. De hecho, los grupos proponentes no han solicitado la vía de urgencia para acelerar los plazos.
La secretaria general del PP ha criticado que sean los grupos parlamentarios los que presenten la iniciativa. “Lo lógico es que la proposición vinera del Gobierno, informada por el Ministerio de Hacienda, con informe del Banco de España. Que se legislara con garantías”, ha señalado.
Gamarra ha arremetido además contra el futuro impuesto porque “tal y como se establece, no es finalista”. “El objetivo es que el dinero vaya a la caja y que no repercuta de manera directa en los españoles”, ha acusado. La dirigente del PP ha recordado que la Comisión Europea debate estos días cómo afrontar los beneficios extraordinarios de las empresas energéticas y ha anticipado, sin aportar pruebas, que la iniciativa que esta semana iniciará su trámite en el Congreso “será contraria al derecho comunitario”.
“El presidente cerrará 2022 con un exceso de recaudación próximo a los 30.000 millones. Está siendo el primer y máximo beneficiario de la inflación”, ha insistido, para reiterar: “Queremos que el dinero se quede en casa de los españoles, no en la caja del señor Sánchez”.