Taipéi, 29 nov (EFE).- El presidente taiwanés, William Lai, emprenderá este sábado su primer viaje al extranjero como mandatario bajo la amenaza militar de China, que ya ha expresado su rechazo frontal al tránsito del líder isleño por los territorios estadounidenses de Hawái y Guam.
Lai, considerado como un “independentista” y un “alborotador” por las autoridades de Pekín, partirá de Taiwán alrededor de las 16:30 horas (08:30 GMT) del sábado rumbo a Hawái, en donde hará una escala de dos noches, según fuentes gubernamentales citadas por la agencia estatal de noticias CNA, un canal empleado por el Gobierno taiwanés para avanzar informaciones especialmente sensibles.
Posteriormente, Lai visitará las Islas Marshall, Tuvalu y, tras pasar una noche en Guam y otra en Palau, regresará a Taiwán en la tarde del 6 de diciembre.
Este viaje, el primero de un mandatario taiwanés al Pacífico desde 2019, tendrá lugar en un contexto de crecientes tensiones entre Taipéi y Pekín, que considera a la isla autogobernada como una parte inalienable de su territorio.
Estrechar lazos con los aliados del Pacífico
Durante su gira de siete días, Lai buscará “fortalecer” las relaciones de Taiwán con sus tres aliados diplomáticos en el Pacífico, en un contexto de fuerte competencia entre Estados Unidos y China por su influencia en esta región.
La comitiva del mandatario estará conformada por varios pesos pesados de su Gobierno, entre ellos el ministro de Asuntos Exteriores, Lin Chia-lung, el secretario general de la Presidencia, Pan Men-an, y la titular del Consejo de Asuntos Oceánicos, Kuan Bi-ling.
Según la Oficina Presidencial, Lai mantendrá encuentros por separado con los jefes de Gobierno de estas tres naciones insulares, como son la presidenta de las Islas Marshall, Hilda Heine, el primer ministro de Tuvalu, Feleti Teo, y el presidente de Palau, Surangel Whipps Jr.
Respecto a las escalas en Hawái y Guam, territorios que ya visitó la expresidenta Tsai Ing-wen durante su gira por el Pacífico de 2017, Lai las aprovechará para reunirse con “viejos amigos” y sostener intercambios a puerta cerrada con expertos de centros de investigación, indicó la agencia CNA.
Oposición de China y posibles maniobras militares
A lo largo de esta semana, el Gobierno chino ha mostrado en reiteradas ocasiones su firme oposición a la presencia del líder taiwanés en suelo estadounidense, insistiendo en que el principio de ‘una sola China’ es la “norma básica en las relaciones internacionales y el consenso general de la comunidad internacional”.
En una conferencia de prensa, la portavoz de la Cancillería china Mao Ning manifestó el jueves su rechazo a “cualquier forma de connivencia de Estados Unidos en apoyo de los ‘elementos separatistas’” de Taiwán, y reafirmó el repudio de Pekín a que autoridades taiwanesas visiten EE.UU. “bajo cualquier nombre y por cualquier pretexto”.
Ese mismo día, el canciller taiwanés, Lin Chia-lung, aseguró que “no descartaba la posibilidad” de que China lance en los próximos días una nueva oleada de maniobras militares en torno a la isla, que serían las terceras de este año, ya que siempre ha respondido “de alguna forma” a los viajes de los mandatarios isleños al extranjero.
“Instamos a Pekín a que no utilice esta práctica de larga data -los viajes de los presidentes al exterior- como pretexto para reaccionar de forma exagerada, por ejemplo, celebrando ejercicios militares que corren el riesgo de desestabilizar las relaciones entre ambos lados del Estrecho”, aseveró el ministro taiwanés.
Por lo pronto, China ya ha expresado su irritación con un repunte de sus actividades militares en la zona: más de treinta aeronaves chinas, entre ellas cazas de combate y drones, sobrevolaron los alrededores de la isla en las últimas 24 horas, según el último parte diario del Ministerio de Defensa Nacional de Taiwán.
Javier Castro Bugarín