El PSOE está inmerso este fin de semana en el proceso para designar oficialmente a Pedro Sánchez como secretario general tras la consulta a la militancia que ganó el pasado domingo. Las federaciones socialistas celebran los congresillos regionales de los que saldrán las listas de delegados que acudirán el 26 de julio al cónclave en el que se ratificará el resultado.
Los delegados regionales designados el pasado domingo por sus correspondientes agrupaciones locales elegirán qué personas de su federación acuden al congreso extraordinario que oficializará el liderazgo de Pedro Sánchez y pondrá fin al de Alfredo Pérez Rubalcaba. Para los barones del PSOE la elección de la lista es importante para que a Madrid vayan delegados afines que puedan negociar puestos clave en los órganos federales.
Alguno de esos cónclaves se antoja especialmente relevante para la organización. Sánchez y Susana Díaz intentarán hacer una demostración de fuerza en Cataluña al intervenir en la cita del PSC. Los dirigentes socialistas pretenden arropar a Miquel Iceta, recién elegido primer secretario de la organización, frente a los críticos que han abandonado las filas del PSC. Iceta fue el único que presentó los avales, por lo que no tuvo rival.
El total de los 1.019 delegados elegidos este fin de semana -de los que más del 20 % pertenecen a la federación más numerosa, la andaluza- asistirán al congreso extraordinario convocado para el 26 y el 27 de julio. Tras la inauguración del cónclave, los socialistas ratificarán el dictamen que elaboró la Ejecutiva dirigida por Rubalcaba para permitir por primera vez que la elección del secretario general se abriera a la militancia.
A continuación, se ratificará el resultado de la consulta que ganó con casi el 49% de los votos Sánchez frente al 36% que consiguió Madina y el 15% del candidato de Izquierda Socialista, José Antonio Pérez Tapias. Además, los socialistas tendrán que aprobar una modificación de sus estatutos para que, a partir de ahora, la designación del líder sea directa a través del voto de los militantes, según han explicado a eldiario.es fuentes de Ferraz.
En torno a ese punto del congreso socialista hay poca intriga, pero el siguiente punto del día será la votación de los distintos órganos federales (la ejecutiva, el comité y la comisión de garantías) a partir de la candidatura que presentará Sánchez. Las quinielas sobre el círculo de dirigentes del que se rodeará el diputado madrileño ya han comenzado.
Está claro que el nuevo líder del PSOE será generoso con la federación de Díaz, que le proporcionó un respaldo traducido en un tercio del total de los votos que recibió. Entre los nombres que más suenan para entrar en la Ejecutiva son el del madrileño José Cepeda y el del secretario general de La Rioja, César Luena. También la exministra Carme Chacón, que se presentó contra Rubalcaba en el último congreso, podría sumarse a la dirección.
Madina ha rechazado el ofrecimiento de Sánchez de formar parte de la dirección de Ferraz. “Le he trasladado que hay gente de enorme valía que ha trabajado en las tres candidaturas, también en la mía, y que sería bueno para el PSOE que tuvieran un papel relevante en el próximo periodo”, expresó el diputado vasco cuando contestó con una negativa a la oferta de formar parte del equipo.
Pérez Tapias no descarta entrar en la dirección, aunque puntualiza que la decisión dependerá de lo que opinen el resto de los integrantes de Izquierda Socialista. El granadino ha celebrado que su corriente dentro del PSOE pueda tener un mayor protagonismo en Ferraz gracias a “lo que la militancia ha mostrado” en la consulta del pasado domingo.