A la espera de que el Comité Federal lo confirme, el PSOE trabaja ya para garantizar a Rajoy el apoyo parlamentario que permita evitar terceras elecciones. Frente al grupo de barones que apostaba por exigir contraprestaciones a cambio de la abstención, el nuevo poder en Ferraz no quiere negociar.
El PSOE se decanta por facilitar un Gobierno del PP al que hacerle la oposición desde el minuto uno. “Si condicionas la abstención, te estás atando de pies y manos”, aseguran fuentes cercanas a la gestora.
La ausencia de condiciones se ha convertido en las últimas horas en una estrategia compartida entre PSOE y Partido Popular. Fuentes parlamentarias se muestran rotundas: “El PSOE no va a apoyar los presupuestos del Partido Popular”.
En este contexto cabe hacerse una pregunta: “¿Qué gana Rajoy evitando terceras elecciones?”. El líder del PP ha dicho en multitud de ocasiones que nadie podría defender ante el electorado una nueva convocatoria electoral. Sus incondicionales, con María Dolores de Cospedal a la cabeza, pregonaban esta semana todo un listado de exigencias a cambio de evitar unas terceras elecciones. Rajoy, sin embargo, ha decidido clausurar el debate anunciando que acepta las abstenciones del PSOE sin exigencias posteriores de estabilidad.
Históricos dirigentes socialistas creen que Rajoy no puede esperar mucho más tiempo. Según estas fuentes, el presidente en funciones no está en disposición de explicar en Bruselas por qué va a terceras elecciones cuando podría empezar a gobernar en minoría.
A todo lo anterior, hay que sumar el papel del rey. Si el PSOE comunica su intención de abstenerse en la investidura, Rajoy tiene pocas excusas para evitarla.
Con este panorama, Rajoy tiene en sus manos varias opciones: intentar buscar apoyos parlamentarios para sus presupuestos o prorrogar los existentes y realizar las modificaciones necesarias para incluir los nuevos recortes que Europa podría imponer en los próximos meses.
En Génova toman en consideración otro factor determinante: el juicio del caso Gürtel. Según fuentes del PP, al librarse de unas nuevas elecciones se evita también una campaña con la corrupción en boca de todos.
Rajoy pretende que su investidura contribuya a poner sordina a un proceso al que le esperan todavía capítulos destacados como las declaraciones de personajes como Javier Arenas, Ángel Acebes o Esperanza Aguirre.