Solo unas horas después de compartir paseo con Pedro Sánchez por las calles de A Coruña, el líder de los socialistas gallegos, José Ramón Gómez Besteiro, ha decidido borrarse del mapa electoral que marca elecciones autonómicas para el próximo mes de octubre. El secretario general del PSOE gallego ha comunicado este sábado a su ejecutiva su decisión de no presentarse a las primarias que decidirán el nombre del candidato con el que el PSOE se presenta a unos comicios en los que arrebatarle el poder al Partido Popular se presentaba como una opción real. Los problemas con la justicia de Gómez Besteiro han acabado por empujarle a la rendición.
Besteiro tendrá que declarar ante la jueza Pilar de Lara el próximo 11 de mayo para responder por la presunta comisión de los delitos de cohecho, prevaricación, tráfico de influencias, fraude a las administraciones públicas, fraude de subvenciones y delito continuado de malversación de caudales públicos.
El PSOE gallego respondió este viernes a la decisión judicial emitiendo un comunicado desde la diputación provincial de Lugo en el que se señala que los delitos por los que se persigue al socialista habrían sido cometidos en época del Partido Popular. Fuentes del PSOE gallego aseguran que “Besteiro está siendo víctima de una persecución judicial” por la titular del juzgado número de Lugo. El líder del PSOE gallego intentó sin éxito que Ferraz le permitiese aforarse en el Senado para que su caso pasara a manos de otro magistrado. El PP impidió en el Parlamento gallego la votación para designar al del PSOE como senador por mandato de la cámara.
Llegados a este punto, Besteiro ha decidido rendirse y anunciar que no concurrirá a las primarias si en el momento de su celebración continúa imputado. No podía hacer otra cosa: El código ético del PSOE impide la inclusión de imputados en las listas y el acuerdo firmado por Pedro Sánchez y Albert Rivera también hace mención expresa a este punto.
Besteiro ha afirmado este sábado, no obstante, que mantendrá su cargo orgánico de secretario general de los socialistas gallegos.
El último movimiento judicial contra Gómez Besteiro se produce solo unas horas después de haber recibido la visita y el apoyo de Pedro Sánchez con el que se fotografió visitando un mercado de A Coruña este mismo jueves.
El gran problema del PSOE gallego es que a nadie se le ocurre un nombre que llevar a los carteles electorales de las próximas autonómicas. El popular Núñez Feijóo, cuya candidatura tampoco está clara, tiene en su mano jugar la baza de un adelanto electoral que cogería a los socialistas con el pie cambiado y sin margen para buscar candidato.
En Marea, la opción en la que el PSOE piensa como socio futuro para desbancar al PP del poder, tampoco tiene candidato. El panorama de las elecciones gallegas habla de cambio pero en una enorme incertidumbre a pocos meses de la cita con las urnas.
Ferraz considera que el paso atrás de Besteiro es la única opción posible. El entorno de Pedro Sánchez no quiere que el problema gallego se eternice y acabe por enturbiar las negociaciones para buscar un pacto de Gobierno en Madrid.
José Ramón Gómez Besteiro tiene previsto seguir al frente del PSOE gallego, para evitar el nombramiento de una gestora o la convocatoria de un Congreso extraordinario. Nadie en la rúa Pino, sede del PSOE gallego, se quiere arriesgar a realizar cambios profundos cuando es el PP y su presidente Alberto Núñez Feijóo lo que tienen el control de los tiempos y ventaja estratégica de cara a la celebración de elecciones.
ACTUALIZACIÓN: Esta noticia se ha actualizado tras la renuncia formal del candidato socialista, como ya avanzaba este medio en la noche del viernes. ACTUALIZACIÓN