Las diferencias entre el PSOE y Unidos Podemos sobre Catalunya son notorias desde hace muchos meses. Ambos espacios han constatado sus diferencias de criterio en múltiples ocasiones y han dado buena cuenta de ellas ante los medios de comunicación. Unas discrepancias que, hasta ahora, habían sido soslayadas para evitar que pudiera cortocircuitar una relación más fluida entre sus líderes y en el Congreso. Hasta ahora. La inminencia del 1-O y el aumento de la tensión ha polarizado las posiciones. Y el cruce de declaraciones ha comenzado.
En el PSOE no ocultan que la actitud de Unidos Podemos a raíz del conflicto catalán no les gusta. Tras las apelaciones directas a Pedro Sánchez de Pablo Iglesias y Ada Colau este domingo en la asamblea de cargos electos en Zaragoza para que impulse una “alternativa al PP”, dirigentes socialistas respondieron recordándoles que tuvieron la oportunidad de hacerlo en la investidura de Sánchez en 2016.
Ya entonces no se daba la premisa que siempre (también ahora) ha exigido Unidos Podemos y sus confluencias: la celebración de un referéndum pactado en Catalunya. Esa era la línea roja del PSOE. Al rechazo a un referéndum añaden ahora que es un mal momento para lanzar propuestas de este tipo. “No es el momento”, resumió la exministra Carmen Calvo el lunes.
Este martes, Sánchez ha ido un paso más allá al cuestionar que Unidos Podemos busque “un bloque para intentar aislar al actual Gobierno de España”. El secretario general del PSOE endureció su discurso contra Iglesias por llamar a la movilización el 1-O: “Están pensando participar porque consideran que es legitima la votación, que tengan mucho cuidado -avisó-. No vaya a ser que la posición que están manteniendo con el 1-O sirva de coartada al independentismo para imponer la independencia el próximo 1 de octubre”.
En Ferraz aumenta la preocupación ante la posibilidad de que haya una declaración unilateral de independencia de Catalunya, aunque el PDeCAT ya lo ha descartado. El portavoz en el Congreso del partido del president Carles Puigdemont señalaba este martes: “No está en la hoja de ruta de su partido”.
“No” de los comunes a la comisión territorial del PSOE
A las palabras de Sánchez respondían los representantes de Unidos Podemos-En Comú-En Marea en el Congreso. En una rueda de prensa para pedir explicaciones al ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, por los incidentes en la asamblea de cargos electos celebrada en Zaragoza, la portavoz de Unidos Podemos, Irene Montero, ha pedido al líder del PSOE “que recapacite” y se aleje del “bloque del autoritarismo y la ofensiva antidemocrática” de PP y Ciudadanos.
“Todos deseamos que el PSOE esté de lado del bloque de la convivencia, no de la ofensiva antidemocrática del PP. Siempre hay esperanza. Vimos cómo se sumaban al reconocimiento de España como realidad plurinacional”, señalaba Montero.
En la misma línea se expresaba el portavoz de En Comú, Xavier Domènech, quien pedía al PSOE que explicara “si apoyan al PP y la intervención del autogobierno de Catalunya”. Y añadía: “Pediría al PSC y al PSOE que trabajasen para aquello que habían dicho que trabajarían sin descanso tras las reelección de Sánchez, que era echar al PP del Gobierno”. Una referencia a la petición de que lidere una moción de censura que se mantendrá tras el 1-O.
En el discurso con el que cerró el XXIX Congreso Federal del PSOE, Sánchez aseguró: “Voy a trabajar para buscar una mayoría parlamentaria alternativa al PP”. El reelegido secretario general socialista se dirigía tanto a Unidos Podemos como a Ciudadanos. Pero Catalunya le ha distanciado de ambos socios potenciales. El PSOE votó en contra de una proposición presentada por Ciudadanos para apoyar la actuación del Gobierno ante el referéndum mientras Albert Rivera calificaba de “pasteleo” la comisión de estudio propuesta por Sánchez como fórmula para buscar una solución a la crisis catalana.
Una comisión que también separa al PSOE y al grupo confederal. Si Ciudadanos y ERC han asegurado que no asistirán, Domènech también ha advertido a Pedro Sánchez de que los diputados de En Comú tampoco lo harán mientras persista lo que consideran la intervención de la Autonomía catalana por parte del Gobierno. Domènech avisaba al líder del PSOE: “Un diálogo con el autogobierno de Catalunya intervenido es un falso diálogo. Si el PSOE está negociando solo con el PP, está cometiendo un error. Espero que no lo estén haciendo”.
La participación de Unidos Podemos-En Comú-En Marea en la comisión propuesta por el PSOE se daba por hecho. Domènech recordaba este martes que de hecho fue una propuesta que ya había formulado el grupo confederal “en enero”. Esta comisión formó parte de las conversaciones que dieron como resultado la creación de una “mesa de coordinación” entre grupos parlamentarios. Desde julio, no se ha reunido.
Primeras críticas de Sánchez a la Fiscalía General
Pedro Sánchez también ha elevado el tono contra el Gobierno tras no haberse salido en público del guión del “respaldo total” a las actuaciones del Estado tras la convocatoria oficial del referéndum en el Pleno del Parlament. “¿De qué sirve un Gobierno que delega sus funciones en los tribunales?”, se ha preguntado Sánchez: “Esta crisis solo tendrá solución si los políticos cumplen con su deber, que es dialogar, negociar y encontrar un pacto con la sociedad”.
Fuentes de la dirección socialista sí que habían mostrado en privado su disconformidad con algunas actuaciones, como la citación de 700 alcaldes pro-referéndum bajo amenaza de detención o los registros y las detenciones en la sede de la Generalitat que, para algunos socialistas, da alas al relato de los políticos independentistas. Ferraz también mostró su enfado a Génova cuando el PP de Madrid denunció un acto en favor del derecho a decidir en la capital que fue cancelado por un juez y cuando hizo la misma maniobra en Zaragoza para frenar un acto convocado por las Marchas de la Dignidad. En el PSOE aquel gesto causó un gran malestar y una queja ante la cúpula del PP. “Nosotros estamos con el estado de derecho pero ya no nos vamos a callar”, expresó entonces un destacado dirigente de la dirección.
Así, Sánchez ya no ha rehuido las críticas a las actuaciones del Estado que no comparte y ha advertido tanto al Gobierno como a la Fiscalía que deben actuar con “mesura”. “La prudencia es buena para todos, incluido el Fiscal General del Estado”, ha advertido a José Manuel Maza. “Es impresentable”, señala una destacada dirigente sobre las palabras de Maza abriendo la puerta a la detención de Carles Puigdemont: “Con la que está cayendo el fiscal general no puede ir de bolos por todas las radios. Hay que ser más prudente en el fondo y en la forma”, concluye.