A pesar del informe del Consejo de Estado, que responsabiliza al ministerio de Defensa que dirigió Federico Trillo del accidente del Yak-42, toda la reacción del presidente del Gobierno ha consistido en destacar que no tiene más recorrido en los tribunales.
En una de sus salidas para caminar durante sus vacaciones, Mariano Rajoy ha declarado este martes a que el caso, que costó la vida a 62 militares españoles, “ya está sustanciado judicialmente”. Más allá de que todo sucedió “hace muchísimos años”,el jefe del Ejecutivo ha despachado con esta sola frase el dictamen del Consejo de Estado, que es el máximo órgano de consulta del Gobierno y que está presidido por José Manuel Romay Beccaría, también exministro del PP en la época de José María Aznar.
El extesorero del PP, Luis Bárcenas, añadió polémica al escándalo al afirmar ante el juez Pablo Ruz que la defensa de los militares procesados por el accidente se pagó con dinero negro del partido. El anterior titular del ministerio, Pedro Morenés, aseguró que su departamento había investigado el asunto y que era falso.
Rajoy nombró a Trillo embajador en Londres el 30 de marzo de 2012, una de las ambiciones del que fue responsable de las estrategias jurídicas del PP en numerosos flancos.
Por el momento, el único dirigente del PP que ha sido preguntado por el asunto es Pablo Casado, vicesecretario de comunicación. En su respuesta, donde ha querido subrayar su apoyo a las familias de las víctimas “que han caído en el ejercicio de su vocación”, ha reconocido que la labor “que hace un ministerio de Defensa es intentar velar por la seguridad de las tropas”.