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Pablo Casado se defiende remarcando las diferencias con el caso Cifuentes

Entrevistas en varios de medios, un briefing con periodistas, una rueda de prensa y sus trabajos. La reacción de Pablo Casado ante la noticia de que consiguió su máster sin ir a clase y sin examinarse ha dejado en evidencia a Cristina Cifuentes, de la que el vicesecretario de Comunicación del PP se ha esforzado en diferenciarse cada vez que ha tenido un micrófono delante. “Este no es un máster universitario, como alguno de los que se está hablando últimamente”, ha insistido.

El País publicó a última hora del lunes que Pablo Casado había obtenido un máster similar al de Cristina Cifuentes, impartido por el mismo organismo, el Instituto de Derecho Público de la Universidad Rey Juan Carlos (URJC), y con el mismo tutor, Enrique Álvarez Conde. Según esa información, Casado obtuvo el título sin ir a clase y sin presentarse a los trabajos.

El vicesecretario de Comunicación del PP dio un par de entrevistas poco después de conocerse esa noticia. Desde un principio se ha esforzado por trazar una línea que separe su caso del de Cifuentes, aunque sin nombrarla directamente. En una entrevista en la cadena SER se apresuró a decir que en este caso “no hay ningún pantallazo de ninguna irregularidad que yo tenga”, en referencia a la primera información de eldiario.es. Ha recalcado en varias intervenciones que su máster no exigía asistencia a clase, también en alusión a Cifuentes.

Además, ha insistido en que ambos casos no son comparables porque el suyo era un curso puente para realizar el doctorado, aunque finalmente no recogió el título porque no optó por doctorarse. “Este no es un máster universitario, como alguno de los que se esta hablando últimamente, que son de los que te dan un título y lo guardas o lo cuelgas en el despacho”, dijo en esa misma entrevista, en la que también dejó claro que no tenía ninguna forma de contactar con sus antiguos profesores o con el tutor, con quien apenas trató, dice.

“Dar explicaciones ayuda a los compañeros”

Este martes ha continuado con esa estrategia de desmarcarse de la dirigente madrileña, en la cuerda floja después de que Ciudadanos haya pedido su dimisión. En rueda de prensa, ha destacado que no gozó de ningún trato de favor: “Yo, en el centro, trataba a la gente de usted. Se me mandó a hacer cola a secretaría, como debe de ser”. Esa comparecencia ante la prensa se ha producido después de un briefing con periodistas en el que Casado ha estado hora y media respondiendo sobre su máster.

El dirigente del PP nacional ha tardado unas horas en convocar a la prensa. La presidenta madrileña, por su parte, solo habló con un par de medios tras la información publicada por eldiario.es, colgó un vídeo en redes, hizo una intervención sin preguntas ante los miembros de su partido y tardó dos semanas en dar una rueda de prensa. Casado no ha dejado pasar la ocasión para referirse a sus diferencias comunicativas a la hora de abordar los dos escándalos cuando le han preguntado por sus similitudes con Cifuentes.

“Dar explicaciones ayuda a los compañeros, hoy mis compañeros lo han tenido muy fácil, solo han tenido que decir que se ceñían a mis palabras”, ha dicho ante los periodistas. Ha ahondado en estas diferencias al afirmar que “como te equivocas es mintiendo, si algo está mal que no sea porque es mentira”. En todo momento, eso sí, ha reafirmado su apoyo a Cifuentes.

Además de la rápida reacción ante los medios, Casado también ha marcado diferencias enseñando documentos sobre su máster. Ha mostrado varios trabajos realizados, que asegura que le fueron convalidados por la realización de los exámenes. Los periodistas también han podido ver las actas de convalidación de 18 asignaturas de las 22 que tenía el máster, aunque no ha repartido copias. Además de mostrarlo en redes sociales, donde ha estado especialmente activo, ha ingresado en la intranet de la Universidad ante los periodistas, a los que ha dicho que ha podido mostrar algunos de los documentos porque los tenía guardados en su ordenador.

De nuevo, las diferencias con Cifuentes saltan a la vista. La presidenta regional no ha conseguido localizar aún su Trabajo de Fin de Máster (TFM), ha mostrado un pantallazo de un correo para justificar su irregular cambio de notas y exhibió durante unos días un acta de evaluación del TFM, hasta que se ha demostrado que ese documento fue fabricado para que tuviese una coartada.

Casado ha tenido mucho más tiempo para preparare que Cifuentes. Cuando saltó la noticia sobre la presidenta madrileña, él mismo advirtió que su máster podría traerle problemas. Así se lo comunicó a la dirección del PP y se puso a reunir la información de la que disponía para cuando alguien le preguntase. Aún así, no ha despejado todas las dudas. No ha mostrado el acta de la comisión evaluadora que explique por qué pudo convalidar 18 de las 22 asignaturas, lo que le permitió superar el curso sin apenas esfuerzo.

Además, Casado no ha distribuido algunos de los documentos en los que sustenta su defensa, alegando que contienen datos confidenciales, aunque él mismo podría ocultarlos antes de entregar esos documentos a la prensa.