El resultado de las elecciones andaluzas, en el que Susana Díaz ha mejorado las expectativas que manejaba Ferraz, ha despertado el interés mediático por el futuro de Pedro Sánchez, cuya relación con la presidenta andaluza se ha enfriado en los últimos meses. En el PSOE aseguran que un buen resultado en Andalucía es positivo para el conjunto del socialismo, pero el sector crítico con Sánchez se ha crecido ante la victoria de Díaz, que durante la campaña no ha dudado en dejar claro que el secretario general aún tiene que enfrentarse a unas primarias para encabezar la lista a La Moncloa.
Tomás Gómez y Carme Chacón han sido los representantes de ese sector que han manifestado un cierto distanciamiento de Sánchez respecto a la victoria electoral al no atribuirle la parte de ese resultado que en Ferraz reivindican. El exsecretario general del PSOE en Madrid ha asistido a la primera reunión de la Ejecutiva federal después de que Sánchez tomara la decisión de destituirle. Gómez ha asegurado que es un “magnífico resultado” y ha aprovechado su presencia en la sede de Ferraz para dejar claro que Díaz ha dado “un impulso a todo el socialismo”.
“Ha quedado reforzada para todo”, ha asegurado Gómez. Ese comentario se percibe como envite dada la tensa relación que protagonizan desde hace unos meses Sánchez y la presidenta andaluza. De hecho, durante la campaña electoral, Díaz mostró ese distanciamiento al negarse a situar a Sánchez en La Moncloa, como él le sugirió. La dirigente andaluza no quiso anticiparse a las primarias de julio y dejó la puerta abierta a que hubiera más candidatos. También es una incógnita saber de parte de quién podría posicionarse Díaz, que aglutina el poder de la mayor federación socialista.
Ahí entra en juego Carme Chacón que, aunque asegura que no ha “echado ni un minuto” a pensar en su posible candidatura a las primarias, no la descarta. La exministra ha aprovechado la presencia de los periodistas en Ferraz para celebrar la victoria “clara” y “clamorosa” de Díaz.
Las alabanzas de la exministra han ido a parar a la presidenta andaluza: “El liderazgo es tener las cosas claras, arriesgar, acertar y ganar, y eso lo ha hecho Susana Díaz de forma muy clara”. Aunque el cuestionamiento de la 'vieja guardia' hacia Sánchez se ha reducido con la cercanía de las elecciones, los cambios de postura sobre ciertos temas fueron la principal crítica hacia el secretario general.
Preguntada directamente sobre si la victoria se puede atribuir a Sánchez, Chacón ha rehuido contestar y lo ha dejado en un genérico: han ganado “todos los socialistas”, pero ha enfatizado que “sobre todo, el triunfo es del socialismo andaluz, sin ninguna duda”. Fuentes consultadas por eldiario.es apuntan que ese comentario se podrá extrapolar más adelante a la inversa si el resultado en las municipales y autonómicas del 24 de mayo no es bueno. Es decir, que si la victoria en Andalucía no se puede atribuir a Sánchez, las posibles derrotas de las autonómicas, tampoco.
El responsable de Política Federal del PSOE, el andaluz Antonio Pradas, ha admitido que este resultado otorga a Díaz un “plus de legitimidad mayor todavía”. “Susana Díaz tiene un liderazgo en el PSOE de Andalucía y en el PSOE de España reconocido; lo que estas elecciones han hecho es cargarla de aún más legitimidad, porque ha sido refrendada ya por las urnas, que es lo que parecía que le exigían otras fuerzas políticas para que se comprobara que existe ese liderazgo”, ha expresado.
Pradas ha afirmado que es “una victoria de todo el socialismo”, aunque ha matizado que ha sido una “campaña muy andaluza”. Las negociaciones entre Ferraz y el PSOE-A concluyeron con tan solo dos visitas de Sánchez durante la campaña frente a las cinco veces aue Mariano Rajoy atravesó Despeñaperros. Díaz asegura que esa decisión fue “lo normal” y que la sobrerrepresentación del presidente fue lo que estuvo fuera de lugar.
El líder de los socialistas valencianos, Ximo Puig, próximo a la presidenta andaluza, ha asegurado que “sale reforzada”: “Esta campaña parecía que era entre Rajoy y Susana y ha ganado claramente Andalucía”, ha afirmado. Puig ha calificado de “absolutamente impresionante” el liderazgo de Díaz, aunque, preguntado por qué parte de su victoria corresponde al líder del PSOE, ha subrayado que “el tanto se lo debe apuntar el conjunto del socialismo andaluz fundamentalmente” pero también “el socialismo español”. “Evidentemente, Susana, como nadie, no es nadie sin el PSOE. Todos somos aquí una parte”, ha apostillado.
La Ejecutiva respalda a Sánchez frente a Gómez
Los dirigentes socialistas han celebrado en la reunión de la Ejecutiva el resultado de las elecciones y han felicitado a los asistentes de la federación andaluza. Fuentes de la dirección señalan que no se ha hablado ni de primarias ni del liderazgo de Sánchez y destacan que Chacón no haya intervenido en el encuentro mientras sí lo ha hecho ante las cámaras.
En la primera convocatoria de la Ejecutiva tras la destitución de Gómez, el exsecretario general de los socialistas ha reprochado a Sánchez las “formas” en las que se produjo su salida, que considera poco democrática. “Sé que hay quien entiende, de manera equivocada, la militancia como una forma de milicia, pero ni siquiera en el Ejército cabe la arbitrariedad, ni el capricho, ni el abuso de autoridad”, ha expresado el excandidato a presidir la Comunidad de Madrid.
Gómez ha pedido a la dirección que restituya el Comité Regional de los socialistas madrileños para que la Comisión Gestora que dirige Rafael Simancas tenga que someter la lista de Ángel Gabilondo a la aprobación de este órgano. Fuentes del entorno de Gómez sostienen que esa candidatura no lograría el aval de la mayoría de sus 700 integrantes.
El exsecretario general de los socialistas madrileños no ha recibido el apoyo de ninguno de los asistentes, que además le han recriminado que haya aparecido en los medios de comunicación advirtiendo de una “gran coalición” que Ferraz ya ha rechazado, según las fuentes consultadas. Sánchez ha mostrado “respeto” hacia las opiniones de Gómez, “aunque no las comparta”. El entorno del exalcalde de Parla, por su parte, subraya los “silencios” de los asistentes de federaciones potentes, como los andaluces, o las ausencias de los miembros de Castilla-La Mancha.