El Gobierno ya tiene encauzado el plan de recuperación con el que pretende transformar y modernizar España con los 140.000 millones de los fondos que la UE aprobó en el marco de la crisis que ha dejado la pandemia de la COVID-19. La comisión interministerial que se creó para abordar el plan le dará el visto bueno este martes para que Pedro Sánchez lo presente en el Congreso en una comparecencia el miércoles y el Consejo de Ministros lo apruebe definitivamente “en unos pocos días”, según él mismo ha anunciado, para enviarlo a Bruselas antes del 30 de abril, que es el plazo máximo. En un evento organizado por el diario El Español, el presidente ha explicado que el plan contendrá un total de 212 medidas, de las que 110 serán inversiones y 102, reformas.
El objetivo es que 72.000 millones de euros se inviertan en el primer periodo -hasta 2023-. De ellos, 27.000 ya están consignados en los Presupuestos Generales del Estado. El Gobierno enfatiza que el conjunto del plan girará en torno a la transición ecológica, la transformación digital, la igualdad de género y la cohesión social y territorial. Sánchez ha asegurado que la pretensión es que esas medidas tengan “impacto inmediato” en la economía española, especialmente en el fortalecimiento de las empresas y la creación de empleo.
En su discurso ha desgranado cuáles serán algunas de las principales medidas que se pondrán en marcha, entre las que ha citado la modernización y competitividad del sector turístico, la hoja de ruta 5G o la transición ecológica. “No partimos de cero: el plan es la continuidad de una agenda estratégica que empezó hace casi tres años”, ha dicho sobre los ejes sobre los que pilota la actuación del Gobierno desde su llegada a Moncloa en 2018.
En cuanto a las inversiones, ha enumerado algunas relacionadas con las energías renovables, como la subasta de 6.000 megavatios, 1.500 millones de euros para proyectos de hidrógeno, la instalación de 150.000 puntos de recarga rápida, o el apoyo a la adquisición de vehículos eléctricos para lograr una flota de al menos 250.000 en 2023. También se digitalizarán 1,3 millones de pymes, así como 140.000 aulas escolares y se crearán más de 65.000 plazas de educación infantil 0-3 años, según ha afirmado Sánchez en su intervención en la que se ha comprometido a la rehabilitación de medio millón de viviendas, que es una de las propuestas del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana para incrementar el parque público de viviendas con el objetivo de rebajar los precios.
Sánchez tiene un discurso triunfalista respecto a la economía española, a pesar de que el Gobierno ha revisado a la baja las perspectivas de crecimiento para este año. “El horizonte es claro: tras la fuerte contracción de 2020, España va a ser uno de los países que más crezca en 2021”, ha expresado el presidente, que ha asegurado que será la segunda nación occidental que más crezca por detrás de EEUU. “España siempre ha podido y podrá”, ha asegurado.
El presidente ha aprovechado, además, para recordar que la UE ha promovido en esta ocasión una salida de la crisis distinta a la que llevó a cabo en 2008 y ha asegurado que los pasos que ha dado en la gestión de la pandemia, como los fondos de recuperación, la compra centralizada de vacunas o la mutualización de la deuda, entre otras, han supuesto “el mayor salto en integración en décadas”. Así, Sánchez se ha mostrado optimista ante lo que ha considerado que puede ser la “historia de un éxito colectivo para Europa y para España”.
Sánchez ha vinculado, además, el ritmo de la recuperación económica al “ritmo de la vacunación” y también ha sido entusiasta a ese respecto al asegurar que se va batiendo “récord tras récord” en el proceso con el que pretende cumplir el objetivo común europeo de que a finales de agosto esté vacunado el 70% de la población. El calendario que ha expuesto el presidente es que en la primera semana de junio haya 10 millones de personas en España con las dos dosis, que a mediados de julio se llegue a los 14, que a finales de ese mes la cifra esté en 25 millones para llegar a los 33 a finales del verano.
Así, ha asegurado que el Gobierno está “al 101%” en la vacunación y la recuperación. “Nuestra política económica siempre ha sido prudente -ha dicho sobre la revisión a la baja-. La mejor política fiscal es el plan de vacunación”. También ha aprovechado para enarbolar la bandera del europeísmo en la adquisición de las vacunas después de que la Comunidad de Madrid sondeara la posibilidad de comprar la vacuna rusa Sputnik. “La pandemia ha puesto a prueba la arquitectura institucional”, ha comenzado diciendo antes de preguntarse: “¿A dónde va un lander o una autonomía sola compitiendo con países de millones de personas en busca de una vacuna?”. “Mejor juntos, mejor unidos”, ha rematado.