Pedro Sánchez carga con dureza contra Pablo Iglesias por convocar una consulta a las bases de Podemos sobre la posición en la investidura antes de que concluyeran, a su juicio, las negociaciones para la investidura. Considera que es una “ruptura unilateral” de los contactos. “Empezamos a intuir que está usando esta consulta trucada para justificar una votación contraria a mi investidura y votando con la ultraderecha”, ha dicho el candidato socialista, que también ha afeado al líder de Unidas Podemos que no se haya movido de su “posición maximalista en relación con un Gobierno de coalición”.
El presidente en funciones se ha declarado “sorprendido y frustrado” desde el viernes por la decisión de Iglesias de convocar una consulta a los inscritos de Podemos acerca de la posición en la investidura. Sánchez se ha mostrado convencido de que su “socio preferente” se ha parapetado detrás de esa maniobra para justificar el rechazo a la investidura.
Sánchez ha asegurado en una entrevista en la Cadena SER que esa “consulta trucada” deja fuera la última oferta que ha planteado: la incorporación de ministros técnicos de Unidas Podemos. El presidente en funciones ha dicho que se la trasladó a Iglesias por teléfono el pasado jueves, mientras que este expresó la semana pasada que se enteró a través de los medios de comunicación y que no se la ha formulado personalmente.
“La propuesta del PSOE no está recogida en esa consulta”
El candidato socialista asegura que es la primera vez “en 40 años de democracia” que una fuerza política plantea a otra entrar en el Consejo de Ministros y ha lamentado que Iglesias lo rechazara: “No solo dijo que no, sino que al día siguiente calificó de idiotez esta propuesta”.
Ha explicado que es la quinta oferta que recibe el líder de Unidas Podemos y que ni siquiera la incluye en las preguntas a los inscritos. Según ha relatado, la primera fue un Gobierno en solitario del PSOE con el apoyo externo del grupo confederal; la segunda, un Ejecutivo de cooperación con miembros de Unidas Podemos en escalones secundarios de la Administración; la tercera, incorporar al Consejo de Ministros a ministros independientes de “reconocido prestigio” propuestos por Iglesias; la cuarta, “rebobinar” y comenzar de nuevo la negociación a partir de los contenidos; y la quinta, nombrar ministros de Unidas Podemos con “cualificación”.
Esas cinco ofertas, según ha explicado Sánchez, “decayeron” el viernes cuando Podemos convocó la consulta que, a su juicio, recoge solo la postura de Iglesias -a quien acusa de no haberse movido de su posición “maximalista”- y la primera oferta del PSOE. “Trata de blindarse para justificar su no a mi investidura por segunda vez”, ha dicho Sánchez, que ha recordado que la maniobra de “precipitar” la consulta cuenta con críticas dentro del partido, como la de Teresa Rodríguez o Ramón Espinar.
Preguntado por si estaría dispuesto a incorporar a miembros del núcleo duro de Podemos, con perfil político, al gabinete, Sánchez ha evitado descartarlo de plano, pero ha reconocido que no le convence por las diferencias entre ambas formaciones en asuntos como Catalunya. “No me gustan los vetos, pero tampoco acepto imposiciones”, ha contestado: “Una de las principales tareas, responsabilidades del presidente, es hacer su equipo”.
Sánchez sitúa a Iglesias en el 'no' con Vox
Sánchez considera que la consulta a la militancia por parte de Iglesias es una forma de esconderse detrás del resultado para “justificar lo injustificable”, que es su voto en contra, como sucedió en 2016. “Estamos hablando de una ruptura unilateral de Iglesias. Estamos en una mascarada bien grande de Iglesias para justificar el no a mi investidura por segunda vez”, ha afirmado el socialista.
“Va a votar con Abascal 'no' a la investidura de un candidato socialista a la presidencia del Gobierno”, ha señalado Sánchez. Los socialistas presionarán a Iglesias, como lo hicieron hace tres años, por situarse del lado de la derecha -en este caso la extrema derecha de Vox- por votar en contra de su investidura.
A una semana de que comience el debate de la investidura, Sánchez ha deslizado que volverá a llamar a Pablo Casado, Albert Rivera y Pablo Iglesias para solicitarles que permitan que haya Gobierno con su abstención dado que “no hay alternativa”. “Probablemente el primer pacto de Estado es que haya Gobierno en este país”, ha zanjado Sánchez antes de concluir que, si no hay investidura en julio, su candidatura “decae” automáticamente y será el jefe del Estado el que tendrá que designarle de nuevo en septiembre pero solo si hay algún movimiento de las demás formaciones cambian su posición y garantizan que salga adelante.