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Sánchez: “Me manifiesto satisfecho con el funcionamiento de este Gobierno. Nos unen más cosas de las que nos separan”

Irene Castro

23 de febrero de 2021 16:49 h

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Pedro Sánchez trata de rebajar la tensión que vive el Gobierno de coalición. Lo hizo este lunes en la reunión de la Ejecutiva del PSOE al destacar la acción de gobierno frente a los choques dentro del Ejecutivo, que tuvieron un punto de inflexión en la relación entre PSOE y Unidas Podemos la semana pasada cuando los de Pablo Iglesias sondearon a otros grupos ante la posibilidad de tumbar la propuesta socialista de una ley de igualdad de trato que no contaba con su visto bueno. El presidente también lo ha hecho en público en la sesión de control en el Senado durante el 'cara a cara' con el portavoz del PP, Javier Maroto, que ha asegurado que Sánchez está “hasta el moño” de su vicepresidente, pero que argumenta que es mejor tenerlo “dentro” del Gobierno. “Me manifiesto satisfecho con el funcionamiento de este Gobierno de coalición con el que llevamos un año. Somos formaciones distintas, con culturas políticas distintas, pero es hay más cosas que nos unen que las que nos separan”, ha expresado el presidente.

Ese es el mensaje de concordia que quiere enviar Sánchez en un momento en el que la tensión en el seno del Gobierno se ha disparado a propósito fundamentalmente de las leyes trans y de vivienda, que son los principales escollos que tiene ahora mismo el Ejecutivo sobre la mesa. Sánchez ha enfatizado que son la “salud, el empleo y la protección social” social los principales ejes que unen a los socios de la coalición: “Es lo que ha venido haciendo el Gobierno desde el principio de la pandemia”. “Somos un Gobierno con 155 escaños. No tenemos una mayoría absoluta”, ha dicho el presidente, que ha reconocido que no solo tienen que “negociar dentro de la coalición sino con otras fuerzas políticas” y ahí ha pedido al PP que se sume a la “unidad”. Tras repasar algunas de las medidas puestas en marcha por el Gobierno, como los ERTE o el plan de vacunación, el presidente ha reiterado que el PP no ha participado de ellas. “Ustedes, como siempre, a por uvas”, le ha espetado.

“¿Van a seguir haciendo lo que hicieron entorpecer, difamar y calumniar o van a ayudar al país?”, le ha preguntado Sánchez a Maroto, a quien ha pedido que tome la decisión de si “toman el camino de la moderación o de la perdición, que es seguir agarrados a la ultraderecha”. “A lo mejor la han tomado y es seguir acomplejados con la ultraderecha”, ha insistido Sánchez, que ha tratado, no obstante, de rebajar el tono con el PP en plena negociación para la renovación de los órganos constitucionales como el Consejo General del Poder Judicial, el Tribunal Constitucional, el Defensor del Pueblo o el consejo de administración de RTVE: “Este Gobierno no es su adversario; no nos alegra que al PP le vaya mal ni en Catalunya ni en España”.

“Dice que están satisfechos. Tiene que mirarse mucho al espejo cada mañana para hacer esa afirmación”, le ha contestado Maroto, que ha echado en cara a Sánchez que tenga como aliados parlamentarios a los siete partidos que han plantado al rey este martes en el acto de conmemoración del 23F que ha organizado el Congreso. “¿No le duele el alma por gobernar España gracias a ellos?”, le ha preguntado el portavoz del PP. “A lo mejor eso sí es anomalía democrática”, ha afirmado refiriéndose a las palabras de Iglesias sobre la “salud” de la democracia en España.

Maroto ha intentado sin éxito que Sánchez se pronunciara sobre el silencio del vicepresidente segundo por los altercados en varias ciudades españolas tras las manifestaciones de apoyo al rapero encarcelado Pablo Hasel. “Él no es el poli malo y usted el poli bueno”, ha dicho Maroto sobre Iglesias y Sánchez: “Él es culpable; pero usted, cómplice”. El portavoz conservador ha acusado al presidente de permitir que “se aliente y justifique la violencia” desde Unidas Podemos y de haber permanecido callado varios días hasta que el viernes se pronunció tajantemente en contra de la violencia que se estaba produciendo en los disturbios. Sánchez también ha eludido responder a la diputada de los comunes Sara Vilà, que ha condenado “toda” la violencia y se ha referido a “la de los que queman contenedores y los que cometen abusos policiales”. “Algunos quieren que veamos solo el dedo y otros que no veamos la luna, que es la falta de libertad de expresión. Hay que abordar con celeridad esta situación”, ha expresado la senadora del grupo confederal en referencia a la reforma para acabar con las penas de prisión para los delitos de expresión.

Sánchez tampoco ha querido responder a las alusiones que Vilà ha hecho a la “liberación de los presos independentista” así como a la “vital importancia” de los indultos y de reformar el delito de sedición. El presidente ha reconocido que tiene “matices” a su intervención, pero ha subrayado que seguirá en la senda del diálogo con el Govern que surja de las negociaciones, aunque ha admitido que su apuesta sería “exportar” la coalición de socialistas y comunes ante lo que considera una oferta “fallida” de las fuerzas independentistas.