Sánchez pide por carta a Mañueco que no condicione los derechos de las mujeres a “mayorías políticas coyunturales”
Pedro Sánchez ha respondido este jueves al escrito remitido por el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, en el que arremetía contra el Gobierno por, según él, “combatir con inusitada dureza una cuestión irreal”, en referencia al plan antiaborto anunciado por su vicepresidente y por el que el Ejecutivo central había iniciado los trámites de dos requerimientos.
En la carta de respuesta enviada por el presidente del Gobierno y a la que ha tenido acceso elDiario.es, Sánchez agradece “sinceramente” el acatamiento de esos requerimientos y el cumplimiento de la ley “sobre todo por la tranquilidad que esto proporciona a las mujeres que residen en Castilla y León al ver que se rectifica una decisión que ponía en peligro sus derechos y cuestionaba la madurez y autonomía de sus decisiones”.
En su escrito, el presidente avisa a Mañueco de que, en cualquier caso, “el Gobierno de España se reserva la posibilidad de actuar en defensa de sus competencias y de la legalidad vigente en materia de salud sexual y reproductiva si en algún momento llegase a materializarse por cualquier vía el anuncio de la Junta de Castilla y León”.
Sánchez le recuerda al presidente de la Junta de Castilla y León que valores recogidos en el ordenamiento jurídico como la igualdad y la libertad o derechos fundamentales como la dignidad de las personas y la igualdad entre mujeres y hombres no son “una mera formulación retórica”, sino “un mandato político y ético para quienes ejercemos responsabilidades públicas”.
“Por lo tanto, cualquier instrumento o estrategia para el ejercicio del poder (...) deben estar guiados por estos principios y contribuir a desarrollarlos. En ningún caso cabe anularlos, rebajarlos o condicionarlos apelando a circunstancias o mayorías políticas coyunturales”, reza el escrito en referencia al pacto de gobierno firmado en su día entre el PP y la ultraderecha de Vox para gobernar en coalición la Junta castellano y leonesa.
El presidente del Gobierno destaca en su carta que la legislación en materia de igualdad y en lo referente, en concreto, a la interrupción voluntaria del embarazo, cuenta con un “amplio respaldo social y parlamentario”, y subraya que las Cortes Generales ya legislaron hace menos de un año penalizar el acoso y la coacción a las mujeres a las puertas de los centros sanitarios. “Si el acoso y las coacciones son inadmisibles a la entrada de dichos centros, mucho menos pueden darse, por mandato legal o indicación administrativa, dentro de los mismos”, apunta.
La misiva remitida a Mañueco desde el palacio de la Moncloa termina con el deseo de que “esta controversia haya quedado resuelta asegurando la plena vigencia de los derechos y la autonomía de las mujeres y le reitero la plena disposición del Gobierno de España para trabajar conjuntamente en beneficio de la ciudadanía de Castilla y León”, concluye Sánchez.
El Gobierno dio por acatados sus requerimientos y el cumplimiento de la ley tras la respuesta ofrecida por Alfonso Fernández Mañueco, que la Moncloa consideró un paso atrás tras la actuación del Ejecutivo: “No habrá ninguna modificación en el protocolo de atención a la interrupción del embarazo, que está ajustado a la legislación nacional vigente y al criterio clínico en cada caso. No se obligará a nada ni a los facultativos ni a las mujeres, por lo que le ruego abandone los esfuerzos de su Gobierno en cuestiones ficticias para poder centrarse en la realidad y en sus competencias”, aseguró Mañueco.
El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, había anunciado en rueda de prensa del Consejo de Gobierno que el ejecutivo autonómico se disponía a desarrollar un protocolo antiabortista en el marco del acuerdo entre PP y Vox para obligar al personal sanitario a ofrecer a las mujeres decididas a practicar la interrupción de su embarazo el latido del feto y una ecografía 4-D.
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