Domingo 20 de junio de 1976. El influyente periodista Indro Montanelli (1909-2001) publicaba una columna en la primera página de Il Giornale titulada E' in gioco l'intera posta (Es la jugada decisiva).
Por primera vez desde la restauración democrática tras la liberación de Italia después de la Segunda Guerra Mundial, la Democracia Cristiana parecía que podía perder unas elecciones en favor del PCI: y ahí fue cuando empezó a emplearse el término sorpasso en política, para describir la posibilidad de que el PCI adelantara a la DC y se convirtiera en la principal fuerza electoral del país.
Montanelli, en aquellos días, expuso en papel impreso los temores de buena parte del poder político, económico e institucional a una victoria comunista en Italia. Aquel alegato, que según los cronistas acabó teniendo gran impacto en las elecciones de ese día, culminaba con una frase que ha pasado la historia reciente italiana. Un alegato que él mismo definía como “discurso del miedo”, pero el miedo, entonces, según él, “es sentido de responsabilidad y de autoconservación”. La frase decía: “Turatevi il naso ma votate DC!”, “tápate la nariz pero vota a la Democracia Cristiana” –frase originalmente pronunciada por Gaetano Salvemini en la víspera de las elecciones del 18 de abril de 1948–.
Al final del recuento, que siguieron miles de personas en la Via delle Botteghe Oscure, sede del PCI, no se produjo el sorpasso: la DC consiguió un 38,71% de los votos y el PCI, que logró su mejor resultado, un 34,37%.
Así lo contaban las crónicas: “Il Partito Comunista Italiano di Enrico Berlinguer ottiene uno straordinario risultato alle elezioni politiche del 21 giugno 1976. Con il 34,4 percento delle preferenze arriva a pochissimi punti di distanza dalla Democrazia Cristiana. Per la prima volta nella storia della Repubblica si parla realisticamente dell’ipotesi del ”sorpasso“ del PCI ai danni della DC. Resta nella memoria il famoso appello di Indro Montanelli, che, spaventato da una possibile vittoria comunista, aveva scritto 'turatevi il naso ma votate DC”.
El término sorpasso ha resucitado, 40 años después, en la política española al calor de la posible confluencia de Podemos e IU para las elecciones del 26 de junio. Pero, en este caso, el significante –sorpasso– tiene significados en disputa.
“Todo esto del sorpasso me suena mucho a broma porque llevo muchos años escuchando de los mismos protagonistas, y me viene a la memoria Julio Anguita y lo que pasó con IU después de aquella vez”, ha dicho este viernes la presidenta andaluza, Susana Díaz.
La dirigente socialista, como otros miembros de su partido, hablan de sorpasso como la posibilidad de que el PSOE pierda la hegemonía de la izquierda, algo que teorizó sin éxito Julio Anguita a mediados de los noventa cuando era el máximo responsable de IU.
Pero el mensaje que se intenta lanzar desde Podemos e Izquierda Unida es otro, y ponen como ejemplo las victorias de las candidaturas municipalistas –Madrid, Barcelona, Zaragoza, Santiago, Ferrol, Coruña, Cádiz– y los éxitos electorales de las confluencias En Comú Podem, En Marea y Compromís-Podemos. Es decir, el objetivo que intentan de la alianza entre los partidos de Pablo Iglesias y Alberto Garzón no es tanto superar al PSOE como disputar la victoria electoral.
Así lo explicaba este miércoles Pablo Iglesias en Telecinco:
Y en un sentido parecido se ha expresado Alberto Garzón este viernes en la Sexta:
¿Pablo Iglesias y Alberto Garzón sellarán un acuerdo para el 26J? ¿Habrá sorpasso? ¿Al PSOE? ¿Al PP? ¿Operará en la España de 2016 un mensaje parecido al de Indro Montanelli de 1976? “Turatevi il naso ma votate DC!”