Susana Díaz reaparece en Madrid con sendas entrevistas en Telecinco y La Sexta. Lo ha hecho primero en el programa de Ana Rosa en el que ha comenzado abordando la relación del PSOE y el PSC. Horas antes de que el presidente de la gestora se reúna con el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, para negociar el futuro de la relación entre ambos partidos tras el desacato de los diputados catalanes a la orden de abstenerse para dejar gobernar a Mariano Rajoy, Díaz ha asegurado que quiere que PSOE y PSC sigan juntos, aunque ha evitado dar una receta para acabar con la “asimetría” entre ambas formaciones. Tampoco ha querido pronunciarse sobre la posibilidad de sacar al PSC de los órganos federales del PSOE, lo que supondría que los militantes catalanes no participen en la elección del próximo secretario general. “Confío en la habilidad de Iceta y el talante de Javier Fernández”, ha afirmado en La Sexta.
“Los que están en los votos no están en la política”, ha asegurado sobre esa posibilidad a la que apuntan algunos dirigentes socialistas. En el sector crítico con la gestora temen que la propuesta de Fernández sea sacar al PSC de la Ejecutiva, el Comité Federal y el congreso con el objetivo de que los cerca de 18.000 militantes no participen en las primarias para designar al sustituto de Pedro Sánchez. Consideran que esa maniobra beneficiaría a la líder andaluza en la batalla por el liderazgo.
Díaz ha dejado claro que le parece mal que el PSC participara en la votación del Comité Federal en el que se decidió la abstención y luego optara por mantener el 'no' en la investidura. Considera que fue un “choque de legitimidades” que hay que evitar. “Todos los militantes deben tener los mismos derechos y deberes -ha dicho-. Para reforzar la política hay que ser justos con el resto de compañeros”. “Si participas en una votación la primera norma es aceptar el resultado”.
Ha evitado pronunciarse sobre cuál debe ser la solución para la relación entre ambas formaciones. “No estoy en eso ni me interesa”, ha asegurado dejando la responsabilidad en Fernández e Iceta. “La solución la tienen que dar ellos, que son los responsables -ha repetido-. Debe ser compatible la autonomía, caminar juntos y que haya simetría orgánica”.
Díaz, que se ha quejado durante la entrevista de las calificaciones negativas que ha recibido, ha asegurado que “ha habido mucha intoxicación” en relación a su posición sobre el PSC y ha dicho varias veces que “lo que no puede ser” es que “el PSOE se haya enterado por la prensa” de cuestiones como la defensa del derecho a decidir o de las negociaciones con los independentistas. Sobre la propuesta del PSC de definir a Cataluña como nación, que no ha gustado en el sector más españolista del PSOE, ha expresado que deberán explicar si se trata de “reconocer la diversidad” o especificidades del territorio o de posibilitar romper con España.
Sobre los otros ocho diputados que mantuvieron el rechazo a Rajoy, Díaz ha evitado decir cuál debe ser la sanción, pero ha asegurado que no le ha gustado el argumento para saltarse la orden del Comité Federal. “Nadie tiene más conciencia que otro en ese grupo parlamentario”, ha argumentado.
Sobre la batalla por el liderazgo: “No estoy en eso”
La presidenta andaluza no ha querido revelar sus planes ante la batalla por el liderazgo del PSOE: “Cuando llegue el momento estaré donde quieran mis compañeros”, se ha limitado a decir, “en la cabeza o en la cola”, ha insistido. En el PSOE muchos la ven como la próxima secretaria general y dispuesta esta vez a presentarse. “Será lo que quieran los militantes, pero estoy convencida de que querrán un PSOE ganador”, ha aseverado.
Además de ese mensaje, ha lanzado otros dos al final de la entrevista. Ha pedido no tener una “visión” clasista con los dirigentes, es decir, no “mirar al sur como si fuera de menor calidad”. En cuanto a la posibilidad de compaginar el liderazgo del PSOE con la Junta de Andalucía ha sido clara: “No entiendo que tenga que renunciar al compromiso que tengo con los andaluces, pero no estoy en eso”.
Díaz no ha querido polemizar sobre las palabras de Pedro Sánchez hace un par de semanas, cuando admitió que la presidenta andaluza difirió de su estrategia desde el principio de su mandato. Pero sí ha dejado claro que la etapa de Sánchez al frente de Ferraz “no ha sido un éxito”. Eso sí, sobre las visitas que tiene previstas Sánchez a hacer recorriendo España, Díaz asegura que “tendrá las puertas abiertas en Andalucía como cualquier otro compañero”.
La líder de la federación más poderosa del socialismo ha aprovechado para recordar que el PSOE obtuvo el peor resultado de su historia y bajó con Sánchez al frente de los 110 a los 85 escaños. “Hoy tenemos un partido más dividido”, ha subrayado. “El PSOE no puede salir a ser el primero de la izquierda sino a ganar las elecciones”, ha avisado Díaz, que ha reivindicado que el PSOE andaluz lo hace.
“Tendremos que repensar entre todos un partido ganador”, ha expresado Díaz, que ha defendido que la gestora vaya a organizar una conferencia política en los próximos meses antes de dirimir en primarias quién se hace con el liderazgo del partido. La líder andaluza se ha mostrado convencida de que los socialistas lograrán recuperarse “muy rápido y va a volver a ser un partido de mayorías”.
También ha defendido que la caída del secretario general se produjo de forma “democrática” tras “un debate y una votación”. Sostiene que el Comité Federal tras el que dimitió Sánchez y que el presidente de la gestora, Javier Fernández, rechazó la propuesta de un congreso exprés.