El portavoz de Unidas Podemos en el Congreso de los Diputados, Pablo Echenique, ha considerado este martes “algo gravísimo” que 65 teléfonos móviles de dirigentes soberanistas, sus abogados o familiares fueran intervenidos entre 2018 y 2020 por el sistema israelí de ciberespionaje Pegasus, tal y como desveló el lunes Citizen Lab, un grupo de expertos en ciberseguridad de la Universidad de Toronto
En rueda de prensa en el Congreso, Echenique ha recordado que “en España intervenir comunicaciones sin orden judicial es un delito”, por lo que ha asegurado que “tienen que rodar cabezas”. El dirigente de Unidas Podemos ha equiparado el escándalo con el espionaje a Bárcenas ordenado desde el Ministerio del Interior cuando gobernaba el PP de Mariano Rajoy, así como con la llamada Operación Catalunya que también espió a dirigentes independentistas.
“No puede haber ninguna duda de que pueda estar ocurriendo algo similar con los ministerios del PSOE”, ha zanjado Echenique, que ha considerado que el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, y la de Defensa, Margarita Robles, deben poner en marcha una “investigación sobre estos hechos” para que se “depuren responsabilidades”.
Echenique ha recordado que, según la información desvelada por Citizen Lab, “se ha utilizado un programa extranjero para intervenir las comunicaciones privadas”. “Esto no es aceptable en una democracia moderna y tiene que disiparse cualquier tipo de duda”, ha remachado.
Torra, Mas, Otegi o Iñarritu
La lista de las 65 personas vinculadas al independentismo espiadas abarca tanto políticos de primera línea como ayudantes o personas cercanas. Hay políticos de todos los partidos (ERC, Junts, PDeCAT, CUP y PNC) así como dirigentes de Òmnium y la ANC. Entre ellos, destacan ocho ataques al teléfono de Joaquim Torra mientras ejercía la presidencia de la Generalitat entre 2018 y 2020, así como a Artur Mas una vez ya fuera de la Generalitat.
Además, figuran como hackeados, entre otros, los políticos de Junts Albert Batet, Antoni Comín, Elsa Artadi, Joan Ramon Casals, Joaquim Jubert, Jordi Sanchez, Josep Rius, Laura Borràs, Meritxell Budó, Miriam Nogueras; los de ERC Meritxell Serret, Marta Rovira y Josep Maria Jové; los de la CUP Albert Botras, David Fernàndez y Carles Riera; así como los miembros de Òmnium y la ANC Jordi Bosch y Elisenda Paliuze; la esposa de Jordi Cuixart, Txell Bonet; o los políticos de Bildu Arnaldo Otegi y Jon Iñarritu.
En el caso de los independentistas catalanes, los móviles de los republicanos Roger Torrent y Ernest Maragall; la cupaire Anna Gabriel y el activista de la ANC Jordi Domingo ya sufrieron ataques con el programa israelí en 2019. La investigación abierta en un juzgado de Barcelona no ha conseguido arrojar luz sobre quién encargó el hackeo de los teléfonos de Torrent y Maragall, quienes sospechan que detrás estaría el Centro Nacional de Inteligencia (CNI).