“Hasta aquí hemos llegado”. Con esa frase ha dejado claro Pablo Casado que su discurso en la moción de censura de Vox iba a dirigirse contra el candidato de la extrema derecha. El líder del PP ha dedicado toda su intervención a atacar a Santiago Abascal, que apenas ha hecho uso de su turno de réplica, y no ha respondido a la multitud de pullas que le ha lanzado Casado.
El presidente del PP ha aclarado que su partido iba a votar 'no' a la moción durante un discurso lleno de ataques políticos y personales a Santiago Abascal, al que ha acusado de presentar esa iniciativa “contra el partido que le ha dado trabajo durante 15 años”.
El líder de Vox se ha subido a a tribuna con un tono mucho menos duro. Aunque ha comenzando diciéndole que “ha vuelto el vicesecretario de Mariano Rajoy”, el resto de su intervención no ha incluido ataques. De hecho, lo único que ha hecho es pedir a Casado que les de “las gracias por haber facilitado los gobiernos de Murcia, Andalucía y Madrid a cambio de cero cargos”. “No les hemos pedido nada para nosotros”, ha dicho Abascal antes de anunciar que su apoyo en esos gobiernos se iba a mantener.