El mes de agosto está siendo tan atípico en España que ni los políticos se han atrevido a anunciar sus vacaciones, pero en sus días de descanso pueden aprovechar para leer alguna novela que sirva para afrontar mejor la situación de bloqueo. Entre los 'deberes' de lectura que los parlamentarios escritores pondrían a los líderes de los partidos figuran estos:
- “Memorias de Adriano”, de Marguerite Youcenar:
El senador socialista Jesús Martín Rodríguez recomienda a los líderes políticos la emblemática obra de Yourcenar, el retrato del emperador romano como “un hombre de Estado que no abandona su vida personal” y que queda “secuestrado por sus emociones sentimentales”.
Cree que es una obra que “da la talla de lo que podría ser una forma de enfrentar el presente” porque Adriano “lo resuelve anteponiendo el Estado a él mismo, algo que nos hace falta a todos y todas”, argumenta Martín Rodríguez.
- “Mi guerra de España”, de Mika Etchebéhère:
La diputada de Unidos Podemos Sofía Castañón apuesta por una obra de memorias, el “testimonio de una miliciana al mando de una columna del POUM”, según figuraba en el título de la primera edición en castellano de esta obra francesa de 1975.
Este libro sirve para “comprender la historia reciente de nuestro país y lo que significa reivindicar una memoria democracia”, según Castañón, además de para comprender “muchas cuestiones de género que a una parte del arco parlamentario se le escapan”.
- “Cinco horas con Mario”, de Miguel Delibes:
El diputado del PP Mario Garcés cita tres libros cuando se le pregunta por los deberes de lectura para líderes políticos. El de Delibes para que “por fin, alguien pueda entender que no se puede vivir miserablemente del discurso de las dos Españas”.
Pero añade “La flecha del tiempo”, de Martin Amis, para que “ciertos políticos adanistas de izquierda intenten replicar este viaje inverso en el tiempo para ver de dónde venimos”. Y a Baltasar Gracián, aragonés como él, con su “El arte de la prudencia” porque la obra empieza con “ni al justo leyes, ni al sabio consejos”.
- “Los pazos de Ulloa”, de Emilia Pardo Bazán:
La diputada de Ciudadanos Marta Rivera de la Cruz recurre también a una escritora de su tierra, la gallega Emilia Pardo Bazán y su “Los pazos de Ulloa”; junto con “La Regenta”, de Clarín; y “Fortunata y Jacinta”, de Benito Pérez Galdós.
El objetivo es “reconocer la riqueza del castellano” a través de estos autores, porque “a veces comprimimos el idioma y le restamos fuerza y hay que volver a quienes usaban la lengua como una caja de fuegos artificiales”, advierte.