En algún lugar hay algo que necesitas leer.
Lo que oculta 'La Razón' al cargar contra Manuela Carmena sobre los desahucios
El 21 de junio, el periódico La Razón dedicó un artículo a los desahucios. Se tituló “Sé que Carmena no va ayudarme”. La historia relata el periplo de una mujer que tiene dictaminado el desahucio de su vivienda de alquiler protegido y que contesta al diario: “Si es verdad que quiere parar los desahucios, que se reúna con los fondos buitre que se han hecho con las viviendas de protección oficial como la mía, que eso no lo ha hecho, que yo sepa”.
Lo que no ilustra el periódico es que esta casa era patrimonio público y que fue la anterior alcaldesa, Ana Botella (PP), la que la vendió a un fondo buitre que, ahora, impulsa el desalojo. El artículo dice: “Hasta 2014 era de protección oficial” y que “hoy está en manos de un fondo de inversión” y añade que “en octubre le notificaron que la vivienda había sido vendida a un fondo de inversión o fondo buitre”. Las reuniones a las que se refiere son a las que la actual alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena (Ahora Madrid), ha mantenido con el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri y con los máximos responsables del Banco Santander y el BBVA, Ana Patricia Botín y Francisco González. El mismo día que se vio con los banqueros, el 19 de junio pasado, Carmena, en una entrevista en la cadena SER afirmaba que el acuerdo con Bankia estaba próximo “en cosas concretas”. La idea, según ha contado Carmena, es contar con viviendas vacías del parque inmobiliario de estas entidades para ofrecer “una solución habitacional” a quienes deben abandonar sus casas por un desahucio decretado por los jueces (que son los que tienen la potestad legal para ordenar los desalojos“.
El diario dirigido por Marhuenda contaba que “mientras Manuela Carmena mantiene reuniones en grandes despachos cubiertos de moqueta y asegura estar detrás del remedio milagroso que va a acabar con los desahucios, miles de familias como la de Elisa viven día a día con la angustia de saber que de un momento a otro van a echarlos de sus casas”. La angustia de esta mujer ha sido provocada, en este caso, por el fondo de inversión Blackstone que, mediante su inmobiliaria Fidere, ha denunciado los impagos de esta inquilina y provocado el procedimiento de desahucio. Un problema que ha surgido al vender la anterior alcaldesa de Madrid, Ana Botella, promociones de vivienda pública protegida patrimonio de la ciudad al fondo oportunista. Las casas de estas características pasaron a ser propiedad de Fidere, la que ha recurrido a la justicia para que un juez decrete el desalojo.
El artículo recoge que a esta afectada el cambio de propiedad provocado por la operación impulsada por Ana Botella no le importó: “Esto no supuso un problema para Elisa porque estaba trabajando y podía pagar el alquiler”. El problema ha surgido cuando esta inquilina se ha quedado sin trabajo y no ha podido hacer frente a las mensualidades. Entonces, el fondo inversor-buitre no ha empatizado con su problemática: a la calle.
El 21 de junio, el periódico La Razón dedicó un artículo a los desahucios. Se tituló “Sé que Carmena no va ayudarme”. La historia relata el periplo de una mujer que tiene dictaminado el desahucio de su vivienda de alquiler protegido y que contesta al diario: “Si es verdad que quiere parar los desahucios, que se reúna con los fondos buitre que se han hecho con las viviendas de protección oficial como la mía, que eso no lo ha hecho, que yo sepa”.
Lo que no ilustra el periódico es que esta casa era patrimonio público y que fue la anterior alcaldesa, Ana Botella (PP), la que la vendió a un fondo buitre que, ahora, impulsa el desalojo. El artículo dice: “Hasta 2014 era de protección oficial” y que “hoy está en manos de un fondo de inversión” y añade que “en octubre le notificaron que la vivienda había sido vendida a un fondo de inversión o fondo buitre”. Las reuniones a las que se refiere son a las que la actual alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena (Ahora Madrid), ha mantenido con el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri y con los máximos responsables del Banco Santander y el BBVA, Ana Patricia Botín y Francisco González. El mismo día que se vio con los banqueros, el 19 de junio pasado, Carmena, en una entrevista en la cadena SER afirmaba que el acuerdo con Bankia estaba próximo “en cosas concretas”. La idea, según ha contado Carmena, es contar con viviendas vacías del parque inmobiliario de estas entidades para ofrecer “una solución habitacional” a quienes deben abandonar sus casas por un desahucio decretado por los jueces (que son los que tienen la potestad legal para ordenar los desalojos“.