Francisco Toscano ya ha fijado el momento de su adiós como alcalde: será este viernes, 21 de enero, cuando se celebre el pleno extraordinario en el que presentará su renuncia. La sesión se celebrará tras otra de carácter ordinario a las 12 horas en la que Toscano ejercerá por última vez como regidor, para a continuación renunciar al cargo y también a su acta de concejal en un acto que será “administrativo y rápido”, tal y como apuntan fuentes municipales.
Alcalde desde 1983 en la que es una de las ciudades más importantes de Andalucía con sus 138.000 habitantes, Toscano ha ejercido estos 39 años sin mayores problemas políticos gracias a sus diez victorias por mayoría absoluta consecutivas. Ahora, a sus 72 años, dice adiós a la Alcaldía esgrimiendo para ello precisamente su edad y la convicción de que en estos momentos puede procederse a una transición ordenada.
La decisión era conocida desde hace tiempo en círculos del PSOE sevillano y andaluz, así como el nombre de su relevo: Francisco Rodríguez, número 3 en las elecciones de 2019 y mano derecha de Toscano desde hace años. Rodríguez (Dos Hermanas, 1970), es funcionario del Ayuntamiento nazareno desde 2000 y concejal desde 2003. Diputado provincial, el pasado jueves fue reelegido secretario general del PSOE local, y desde noviembre es secretario coordinador de Política Territorial de los socialistas andaluces en la nueva ejecutiva de Juan Espadas.
Rodríguez viene asumiendo desde hace tiempo funciones propias del alcalde, al que ha representado en numerosos actos relevantes como fue la toma de posesión de Antonio Muñoz como nuevo regidor de Sevilla tras el adiós de Espadas. Se hará cargo de la Alcaldía en una fecha todavía por concretar, asumiendo mientras tanto el cargo como alcaldesa en funciones Basilia Sanz, número 2 en la lista socialista y que ha renunciado a su derecho legal a ser regidora para dar paso así a Rodríguez.
Toscano, presidente del comité federal del PSOE de Pedro Sánchez hasta 2021, ha sido diputado provincial y presidente de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP) y siempre se le ha considerado un verso libre dentro del socialismo andaluz. De hecho, las discrepancias internas le llevaron en 2012 a renunciar como presidente de la FAMP dando un aparatoso portazo pese a que con ello dejaba el cargo en manos del PP. Su poder real dentro del partido siempre ha estado por encima de su puesto orgánico, ejerciendo una gran influencia como demuestra que Dos Hermanas llegara a convertirse en el escenario de las campañas de arranque del PSOE nacional.
Enfrentado en muchas ocasiones a la dirección de turno, fue sin embargo un apoyo importante para dos presidentes del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero y sobre todo Pedro Sánchez, al que convenció para seguir en la arena política tras su defenestración como secretario general en 2016. Desde Andalucía fue uno de los pilares de Sánchez en las primarias en las que en 2017 arrolló a Susana Díaz, con la que no ocultaba su radical discrepancia, y el año pasado fue también uno de los respaldos de Espadas para desbancar a la otrora presidenta andaluza como secretaria general de los socialistas andaluces.
En el plano municipal, y al margen de infraestructuras simbólicas como el velódromo y el hipódromo, el gran proyecto de Toscano ha sido el de conectar el casco histórico de Dos Hermanas con la lejana barriada de Montequinto, para lo que impulsó el desarrollo de Entrenúcleos, un enorme barrio que es casi un pequeño municipio en sí mismo. Y para el recuerdo, el órdago que le hizo al Ayuntamiento de Sevilla para reclamarle sus barrios más al sur, como Bellavista y Los Bermejales, asentados en suelos que le fueron arrebatados a Dos Hermanas por un decreto de Queipo de Llano.
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