Que la situación en el grupo municipal de Adelante Sevilla no es precisamente la mejor es un secreto a gritos en el Ayuntamiento hispalense. Tras una crisis interna que llevó incluso al cambio de portavoz, una operación a la que luego se le dio parcialmente marcha atrás, este miércoles se daba un paso más hasta ahora inédito: los concejales han votado de manera diferente en el pleno.
La sesión que validaba el Plan de Movilidad Urbana de Sevilla (PMUS) ha sido el escenario para escenificar las tensiones en el grupo. La portavoz, Susana Serrano, se abstenía, mientras que los otros tres concejales de la formación (Daniel González Rojas, Sandra Heredia y Eva Oliva) votaban en contra. La visualización de esta disparidad fue posible gracias a que la propia Serrano solicitó voto nominativo, ya que de lo contrario sólo hubiese votado ella como representante del grupo.
Durante el pleno sólo pudo intervenir Serrano, como portavoz que es del grupo, para indicar que un documento como el PMUS “es muy necesario” pero que entiende que “es muy difícil poner de acuerdo a todos”. Y aunque apuntó varias cuestiones en las que cree que es mejorable el plan, incidió en que se han aceptado varias alegaciones de su grupo, como las relacionadas con el BTR (Bus de Tránsito Rápido).
Contradicción vía comunicado
La voz a los concejales que votaron 'no' se la puso un comunicado que IU colgó en su web, en el que se rebatía parte de lo dicho por la portavoz: considera que no se ha tenido en cuenta la mayoría de alegaciones presentadas y que la propuesta sobre los BTR “sigue en el aire”, además de criticar “un proceso de participación que ha dejado mucho que desear”. “En resumen, el PMUS aprobado no supone ningún avance real en sostenibilidad ni en planificación de la movilidad de nuestra ciudad”, lamenta IU.
El comunicado apunta que “IU vota en contra del PMUS”, y es que a esta formación pertenecen González Rojas y Oliva, aunque Heredia es militante de Podemos. Para terminar de enredar la cuestión, se da la circunstancia de que Susana Serrano es precisamente la máxima responsable de Podemos en Sevilla.
Cambio en la portavocía y marcha atrás
Lo ocurrido es un reflejo más de la tensa situación que se vive en el seno de Adelante Sevilla, lo que se traduce por ejemplo en que no se celebran reuniones de coordinación. Todo ello cristalizó hace un año, cuando los mismos tres concejales que este miércoles votaban en sentido contrario al de su portavoz se unieron para forzar el cese de Serrano en este puesto. González Rojas asumió entonces el cargo, aunque la situación se recondujo y medio año después, ya en diciembre, se introdujo una portavocía rotatoria.
En virtud del pacto sellado, Serrano será portavoz hasta el próximo 30 de noviembre para pasarle entonces el testigo de nuevo a González Rojas, que ocupará el puesto hasta el 31 de agosto de 2022. La líder sevillana de Podemos volverá a la portavocía desde el 1 de septiembre de 2022 hasta el final del mandato, fijado para mayo de 2023.
Un mar de incertidumbres
Por si esta tensión interna fuese poco, el grupo municipal está rodeado de incertidumbres políticas, empezando por que la marca Adelante se la ha quedado Teresa Rodríguez pese a que nació como confluencia de Podemos e IU. Eso, y la nula interlocución en el grupo municipal, ya llevó a la asamblea de IU en Sevilla a darle un toque de atención a Podemos para activar un proyecto conjunto y estable de cara a las elecciones municipales de 2023.
Sea como sea, a esos comicios concurrirá una candidatura muy diferente a la de Adelante Sevilla en 2019, cuando se presentó con estas siglas una coalición de siete partidos. Desde entonces, Equo ha dejado el grupo y ahora se debate entre ir en solitario o conformar nuevas alianzas, mientras que Izquierda Andalucista y Primavera Andaluza van de la mano con el proyecto de Teresa Rodríguez. Y a todo esto, hay un nuevo actor en el escenario como es Más País, que se presentará a las municipales para completar así el poliédrico panorama de una izquierda que, a la espera de lo que ocurra de aquí a que se constituyan las candidaturas, está más fragmentada que nunca.