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En Tablada no se va a hacer nada por ahora, pero está por ver lo que ocurrirá más adelante. El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz (PP), ha reiterado en el pleno municipal de este jueves que entre sus prioridades no está urbanizar la gran llanura aluvial “en este momento”, pero considera que está por ver que todo este gran espacio sea inundable como indican el propio PGOU de la capital y otros informes. Por eso, señala que serán los técnicos los que “determinen el nivel de riesgo en cada zona”, lo que conecta con sus afirmaciones anteriores de que en esta dehesa hay espacios que pueden verse afectados por una crecida del Guadalquivir y otros que no.
Ha sido el portavoz socialista, Antonio Muñoz, el que ha llevado la cuestión a la sesión plenaria, para reprocharle sus “continuas contradicciones” sobre una gran parcela que formalmente tiene 360 hectáreas pero que el regidor ha vuelto a elevar hasta las 700. Este suelo, calificado como no urbanizable de especial protección en el actual Plan General de Ordenación Urbana (de 2006), es propiedad de un conglomerado empresarial que lleva un cuarto de siglo litigando para recalificarlo y así poder construir viviendas.
Muñoz considera que las sucesivas –y contradictorias– afirmaciones que ha ido haciendo Sanz sobre estos terrenos “producen desconcierto, desconfianza e inseguridad”, ya que desde hace años la aspiración de la ciudad es que se conviertan en un parque público metropolitano que el PP considera que sería muy costoso de mantener. La respuesta del alcalde ha sido afearle a su antecesor en el cargo que en su etapa “no dejó ni un proyecto ni un dibujito” sobre este hipotético espacio verde en el que está considerado como el último tramo virgen del Guadalquivir en la capital.
En manos de los técnicos
“Si hay zonas inundables más vale olvidarse de ellas” para construir, afirmó Sanz hace unos días al hilo de la DANA que asoló Valencia. Pero eso no significa que comparta que toda la dehesa pueda sufrir este problema por mucho que digan diversos informes, que insisten en que es la gran llanura de inundación del río. La única solución factible sería levantar un considerable muro de defensa, pero esto provocaría que una crecida afectase a municipios ribereños cercanos.
Fue el propio regidor el que abrió este melón nada más llegar a la alcaldía, cuando declaró –y así lo ha reiterado en más de una ocasión– que el gran pulmón verde que se reivindica en Tablada desde hace décadas es “compatible con equipamientos y usos residenciales, comerciales y terciarios”. Posteriormente matizó que no es una prioridad, y que su destino final se decidirá en el nuevo PGOU que quiere empezar a redactar.
En este contexto, “son los técnicos del Ministerio de Transición Ecológica, del Sistema Nacional de Cartografía, de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y de Emasesa los que tienen que determinar el nivel de riesgo en cada zona” de la dehesa. “¿Sabe usted cuál es el nivel de riesgo en cada una de las 700 hectáreas de Tablada?”, le ha llegado a cuestionar de manera retórica a Antonio Muñoz. La propuesta está en sintonía con la que defiende Gaesco, la patronal sevillana de la construcción, que ha reclamado que se acometa un estudio de inundabilidad “para hablar con precisión y datos en la mano, no con estimaciones y opiniones que no están fundamentadas”.
“Viviendas que no existen”
De todos modos, le ha instado a que “no tenga ningún miedo” porque la ley ya estipula que en zonas inundables no se puede construir, “¿cuál es el debate entonces?”. Así que le ha reprochado que “se preocupa por viviendas que no existen, o sólo en su imaginación”, a la vez que ha asegurado que “no es una prioridad en este momento ningún desarrollo de Tablada” porque hay muchos otros “prioritarios” para construir 15.000 viviendas entre 2024 y 2027: 10.500 de renta libre y 4.500 protegidas, de las que 1.511 las promueve Emvisesa, la empresa municipal de la vivienda.
“Preocúpese por realidades”, ha instado a Muñoz, que por su parte ha insistido en la “desconfianza” por su tendencia a “decir una cosa y la contraria”. “¿Cuándo dice la verdad?”, le ha reprochado, y de paso le ha acusado de que sus declaraciones “dan lugar a la preocupación de los vecinos”. “Está abogando por construir en Tablada, ¿qué es lo que no entiende de los informes que dicen que es inundable?”, ha insistido, antes de resaltar que con la respuesta dada en el pleno municipal “sigue instalado en la ambigüedad”.