Cuando Sevilla está a punto de encender su alumbrado navideño, la ilusión de los más pequeños lleva encendida mucho tiempo. También en los hogares más modestos. Precisamente, hasta aquéllos cuya situación hace prácticamente imposible la compra de regalos navideños, llegan juguetes gracias a la colaboración y el trabajo desinteresado de muchas instituciones y asociaciones que se implican para que ningún niño o niña se quede sin su juguete en estas fechas en la capital andaluza.
Como dice el célebre psicopedagogo Francesco Tonucci: “Jugar para un niño y una niña es la posibilidad de recortar un trocito de mundo y manipularlo para entenderlo”. Nada más y nada menos. Y quizás sea en el periodo navideño cuando más importancia conferimos a que los niños y las niñas puedan acceder a un juguete. En Sevilla existen algunas iniciativas que van en esta dirección.
Amigos del Alamillo
La Asociación de Amigos del Parque del Alamillo lleva alrededor de 25 años desarrollando una iniciativa en este sentido, con una doble vertiente: Hacer llegar regalos a un sector de la población infantil que, por la limitada capacidad económica de sus familias o por sus circunstancias vitales, no tendrían acceso a ellos; y, al mismo tiempo, generar entre los pequeños donantes un sentimiento de solidaridad y generosidad que les lleve a desprenderse de parte de sus juguetes para que otros niños y niñas los disfruten.
Se trata, por lo tanto, de juguetes que ya han tenido un uso, pero que se encuentran en perfecto estado y que son expresamente acondicionados y preparados para esta ocasión. En este sentido, esta iniciativa aporta una perspectiva nada desdeñable vinculada al reciclaje y a la sostenibilidad.
La asociación, que tiene su sede en el Cortijo del Alamillo, desarrolla la recogida de juguetes durante todo el año. De hecho, el propio personal de seguridad de este recinto público se encarga de recoger los juguetes que cualquier persona puede aportar en cualquier momento, aunque la sede de la asociación no esté abierta.
No obstante, es en el periodo previo a las fiestas navideñas cuando se intensifica la actividad, según explica su presidenta, Elena de Marcos. “Durante el resto del año tenemos entre ocho y diez voluntarios aproximadamente, mientras que ahora, cuando se va acercando la Navidad, se trata de 15 personas”.
Sevilla y provincia
La Asociación Amigos del Parque del Alamillo cuenta con donaciones de juguetes de particulares, si bien la mayor cantidad procede de centros educativos y colectivos implicados en la campaña, como por ejemplo, el Colegio Maestra Isabel Álvarez y el Colegio Salesianos de Triana, donde se ha convertido en una tradición colaborar con esta iniciativa, según indica De Marcos, así como el CEIP Tomás de Ibarra de Tomares. Entre los colectivos colaboradores se encuentra el grupo MSL de Agencias Inmobiliarias, que recoge juguetes en todas sus oficinas.
El ámbito de la campaña se circunscribe a Sevilla y su provincia, tanto en lo referente a los donantes de juguetes como a beneficiarios. Así, se reciben donaciones de San Juan de Aznalfarache, Mairena del Aljarafe, Tomares o Castilleja del Campo; y a su vez, se facilitan juguetes a entidades pertenecientes a La Algaba, Coria del Río, Palomares o Aznalcóllar. En concreto, hay más de una veintena de entidades receptoras de juguetes, que son, posteriormente, las que hacen llegar los juguetes a los niños y niñas beneficiarios.
Cada año, como presentación oficial de esta campaña de recogida de juguetes, la Asociación de Amigos del Parque del Alamillo nombra a los Recaudadores Reales, personas pertenecientes a distintos ámbitos sociales y culturales, o que colaboran de forma habitual con la campaña.
Durante la campaña del año pasado se acondicionaron para ser reutilizados un total de 12.800 juguetes, con los que se atendieron a unos 3.000 niños y niñas sevillanos, a través de la labor desinteresada de los miembros de la Asociación de Amigos del Alamillo y de colaboradores voluntarios.
Cruz Roja
Con el mismo objetivo, pero con una filosofía diferente, la Asamblea de Cruz Roja en Sevilla realiza también una potente campaña de recogida de juguetes en la capital hispalense cada año cuando se acerca la Navidad. En este caso, se trata de juguetes nuevos, no bélicos y no sexistas, que van destinados a niños y niñas pertenecientes a familias vulnerables o en riesgo de exclusión.
En concreto, según la información facilitada por el Departamento de Juventud de Cruz Roja en Sevilla, este año la recogida se realizará en varias fechas en tres puntos físicos concretos: En Puerta de Jerez los días 13 y 14 de diciembre, de 11.30 a 14.00 horas y de 17.30 a 20.00 horas; en Plasticosur, también los días 13 y 14 en horario de mañana y tarde; así como los días 26, 27, 28 y 29 en el Centro Comercial los Arcos. El año pasado, Cruz Roja logró recoger a través de su campaña juguetes que llegaron a un total de 1.106 familias.
Los “puntos Elfo”
Cáritas Diocesana de Sevilla, por su parte, no realiza por sí misma recogida de juguetes para que lleguen en Navidad a las familias con más dificultades, pero sí constituye uno de los “puntos Elfo” de la iniciativa Elfos y Calcetines, que tuvo su origen en Galicia y que en Sevilla funciona desde 2015 para que no haya niños y niñas que se queden sin regalo de Reyes Magos.
Se trata de un sitio web que hace una tarea de intermediación entre personas interesadas en colaborar donando un regalo e instituciones o entidades, como Cáritas, que colaboran con el mismo fin. En este caso, por ejemplo, Cáritas hace llegar la carta a los Reyes de los niños y niñas seleccionados de entre familias con mayores dificultades y las personas voluntarias a través de Elfos y Calcetines se encargan de hacer realidad el regalo soñado por cada pequeño o pequeña.
Estos son algunos ejemplos que ilustran la implicación solidaria que existe desde muchas entidades, entre las que se encuentran también asociaciones vecinales, hermandades o peñas, para que los niños y niñas, independientemente de su entorno o situación, tengan juguetes en Navidad. Desde caminos y filosofías distintas, la meta no es otra que los pequeños puedan ejercer su derecho a jugar.
No en vano, el derecho al juego está recogido en el artículo 31 de la Convención sobre los Derechos del Niño y dice así: “Los Estados Partes reconocen el derecho del niño y la niña al descanso y al esparcimiento, al juego y a las actividades recreativas propias de su edad y a participar libremente en la vida cultural y en las artes”.