Líderes universitarios de Sevilla de los últimos 40 años condenan el desalojo “violento” de la acampada propalestina

Sara Rojas

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Un total de 60 exrepresentantes estudiantiles de la Universidad de Sevilla de los últimos 40 años han firmado un manifiesto conjunto para condenar el desalojo “violento” de los universitarios que protestaban en el Rectorado de la Hispalense contra la matanza en Gaza. La mayoría de los firmantes –entre quienes figuran nombres como el del coordinador general de Izquierda Unida Antonio Maíllo o la exsenadora y exlíder del Partido Andalucista Pilar González– ya sumaron sus voces en un escrito anterior, difundido hace un mes en apoyo a la acampada universitaria propalestina que echó a andar por entonces.

Esa acampada fue desmantelada la madrugada del pasado martes 11 de junio por la Policía Nacional –a instancias del rector de la Universidad, Miguel Ángel Castro–, después de que los estudiantes decidieran “dar un paso más” en sus reivindicaciones encerrándose en el decanato de la Facultad de Filología, ubicada en la propia sede del Rectorado. Lo que pretendía ser un encierro “pacífico” derivó en un episodio de tensión que se saldó con la irrupción de los agentes en el edificio, con algunos estudiantes heridos y con el final forzado de la protesta estudiantil en defensa de Palestina.

“Ver a los antidisturbios desalojar con violencia a las compañeras de la acampada en dependencias universitarias no hace sino recordarnos a épocas pasadas donde no había libertad de expresión y reunión y el estudiantado tenía que reunirse en la clandestinidad y luchar constantemente contra las fuerzas del orden”, lamentan ahora quienes fueron delegados o vicedelegados del CADUS (Consejo de Alumnos de la Universidad de Sevilla) entre la década de 1980 y 2010, aludiendo a las imágenes difundidas por los propios alumnos en redes sociales.

“Por desgracia, el rector de la Universidad de Sevilla parece empeñado en retrotraernos a esa época”, continúan en el escrito, justificando así que exijan “la dimisión inmediata” de Miguel Ángel Castro “por tan vergonzosa y lamentable actuación”. De esta forma, se solidarizan con los estudiantes y profesores propalestinos que también pidieron la dimisión del rector en una manifestación celebrada el día después del desalojo en aras de reivindicar “diálogo” en lugar de “violencia”.

Universidad como “punta de lanza de la libertad de expresión”

“Las personas firmantes de este manifiesto hemos participado e incluso promovido numerosas protestas que se dieron en el seno de la Universidad, sin haber sufrido nunca un ataque como el padecido por las compañeras de la acampada, quienes no hacen más que defender la legitimidad del estado Palestino y mostrar su solidaridad ante el genocidio que está cometiendo Israel contra su población a los ojos del mundo y con la vergonzosa inacción de los poderes públicos”, recuerdan los 60 exrepresentantes de alumnos que firman el manifiesto conjunto.

Para estos egresados, “la universidad pública debe ser punta de lanza en la defensa de los derechos humanos y la libertad de expresión, además de un modelo a seguir en convivencia y respeto”. De ahí que consideren la actuación policial acometida previa solicitud del actual equipo rectoral como “un auténtico despropósito y una vergüenza para la comunidad universitaria y para toda la sociedad en su conjunto”.

“Permitir la entrada de los antidisturbios en una facultad va en contra de estos principios y no es más que una muestra de la debilidad moral de quien dirige la Universidad de Sevilla”, añaden quienes representaron al alumnado durante su etapa de estudiantes universitarios. Por todo ello, concluyen el escrito reiterando su apoyo al alumnado que ha abanderado la defensa del pueblo palestino desde la institución académica “en su objetivo de demostrar al mundo que estamos en contra del genocidio que Israel está perpetrando en territorio palestino”.

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