Fin a la “mafia del taxi”: el Ayuntamiento de Sevilla recupera los turnos rotatorios en la parada del aeropuerto

El Ayuntamiento de Sevilla ha puesto fin a la conocida como “mafia del taxi”, al aprobar este viernes la vuelta de un turno rotatorio en la parada del aeropuerto. Así lo ha anunciado el delegado de Movilidad, Álvaro Pimentel, al término del Consejo de Gobierno del Instituto del Taxi que se ha convocado este viernes a cuenta de la operación policial contra Solidaridad Hispalense del Taxi, la única asociación de taxistas que hasta ahora operaba en el aeropuerto de San Pablo, que se ha saldado esta semana con 18 detenidos por delitos de coacciones, amenazas, daños y de organización criminal.

Entre los detenidos –posteriormente puestos en libertad con cargos–, figuraban el actual líder de la asociación Solidaridad Hispalense del Taxi, Antonio Velarde, y otros miembros de la directiva de la entidad gremial, que ha formado parte de la reunión de este viernes junto a las otras dos asociaciones profesionales del sector (Unión Sevillana del Taxi y Élite Taxi Sevilla), así como de los grupos políticos con representación plenaria, técnicos expertos y representantes de los consumidores.

La decisión de implantar turnos rotatorio ha contado con “un respaldo mayoritario, sin ningún voto en contra”, según ha informado el delegado de Movilidad, quien ha celebrado que este acuerdo garantizará “un trato adecuado al usuario, una sana convivencia entre los propios taxistas y una mejor relación con otras alternativas de transporte”, poniendo fin a más de 20 años de monopolio en la parada del aeropuerto a base de coacciones y amenazas.

Cómo funciona el sistema rotatorio

El nuevo sistema de turno rotatorio —que entrará en vigor previsiblemente el 1 de febrero, tras ser aprobado en la próxima Junta de Gobierno local— estará basado en el calendario de descansos establecido para las licencias de taxi y se estructura en las cuatro letras que agrupan a las licencias operativas en la ciudad.

De este modo, según explican desde el Consistorio, todos los titulares de licencias tendrán acceso a la parada de taxi del aeropuerto al menos cuatro días al mes –el consiguiente a cada día de descanso– con la posibilidad de disfrutar de hasta siete días adicionales, distribuidos equitativamente a lo largo del año. Durante el período vacacional de verano, se alternarán tres letras en cada quincena para reforzar el servicio en momentos de alta demanda. Este turno rotatorio también se aplicará a aquellos taxis con servicio concertado.

A juicio del delegado de Movilidad, “este modelo asegura una rotación justa y equilibrada que permitirá a todos los taxistas trabajar en el aeropuerto de manera proporcional, asegurando el servicio a los viajeros en esta parada sin que signifique un perjuicio para la atención al resto de la ciudad”. Para valorar la efectividad de la medida y revisar su funcionamiento, Álvaro Pimentel ha avanzado que a finales de febrero se convocará de nuevo una mesa de trabajo con el sector y el resto de grupos políticos.

El caso de la “mafia del taxi”

Con esta medida, el Instituto del Taxi da un paso más en erradicar el monopolio que la asociación Solidaridad del Taxi ha ejercido en el aeropuerto durante décadas, a pesar de representar el 7,5% del sector en capital andaluza. Esta entidad logró acaparar una de las paradas más codiciadas de la ciudad e imponer su propia tarifa específica con precio cerrado “por la fuerza y con medios coactivos”, como manifestó hace años la jueza que instruyó la primera macrocausa contra dicha entidad iniciada en 2017.

Cabe recordar que, a finales de 2021, el Juzgado de Instrucción número ocho de Sevilla ordenaba continuar por el trámite del procedimiento abreviado la causa incoada contra Solidaridad Hispalense del Taxi a título de persona jurídica y contra 27 taxistas de dicha entidad, por posibles delitos de organización criminal, coacciones y daños.

En dicho auto, la jueza instructora detallaba que en el registro policial acometido en junio de 2017 en la sede de la entidad, instalada en el aeropuerto de Sevilla, se encontraron indicios de que la asociación operaba como “una verdadera organización criminal, un grupo perfectamente estructurado y jerarquizado”, que había logrado hacerse con el “monopolio del servicio de taxis en el aeropuerto de Sevilla”. Algo inédito en toda España.

No obstante, ese procedimiento judicial se frustró en 2022 por un problema en los plazos de instrucción. Ahora, los hechos que investiga el Juzgado de Instrucción número cuatro en el marco de la operación policial Aertase, han dado lugar a un nuevo procedimiento judicial como consecuencia de decenas de denuncias a lo largo del tiempo, tanto de otros taxistas como de conductores de vehículos de transporte concertado (VTC) e incluso de particulares, que atestiguan el uso de coacciones y amenazas para ejercer un control exclusivo en la parada del aeropuerto, que ya empieza a liberarse.