El coordinador del Plan de Recuperación del Lince Ibérico en Andalucía y director de Life Lynx Connect, Javier Salcedo, ha informado de la muerte por atropello de dos machos de lince en la carretera A-474 a la altura del municipio sevillano de Benacazón. Durante el año 2023, una decena de estos animales perdió la vida en el entorno de Doñana.
En un audio remitido a Europa Press, ha detallado que uno de ellos (que no llevaba radiofrecuencia de seguimiento de sus movimientos) fue atropellado este pasado miércoles, 17 de abril, concretamente en el kilómetro 18,6 de esta carretera que conecta el Aljarafe sevillano con el municipio onubense de Almonte. El segundo lince ha muerto este mismo jueves, en el punto kilométrico 16,9.
Los linces fallecidos pertenecían a la subpoblación de Doñana-Aljarafe, que crece a un ritmo de un 20% anual, censando durante 2023 a 130 individuos. Ese mismo año se registró el número máximo de cachorros (42), lo que supone un incremento de un 50% con respecto al récord anterior. El actual 2024 está siendo también un buen año en el centro de cría de El Acebuche, en el parque nacional de Doñana.
En cambio, 2023 fue muy negativo con respecto al número de animales atropellados en las carreteras de Doñana superando los dos anteriores, cuando se registraron al menos ocho en 2022 y seis en 2021, después de un 2020 especialmente negro con 12 muertes. Y ello a pesar de las medidas disuasorias para la especie que la Junta de Andalucía afirma haber implementado con cargo al programa europeo Life Safe-Crossing.
Salcedo ha añadido que desde la Consejería de Medio Ambiente se viene trabajando en la disminución “de la mortalidad no natural, tanto atropellos como otras causas”, y se vienen implementando diferentes medidas para reducir el riesgo de atropello “en aquellos puntos donde entendemos que el riesgo de atropello es mayor”.
“A pesar de estas muertes, que muchas veces se producen casi de manera simultánea, no está comprometiendo la tendencia positiva de esta subpoblación”, ha reiterado, además de destacar avances en la conexión de la subpoblación de Doñana con las otras del lince ibérico de la península,“ que entendemos que es la principal amenaza” que afectaba a esta zona.
Por un lado, cita el aislamiento con respecto a otras subpoblaciones, y por otro lado, “la alta endogamia, que se está paliando gracias al programa de reforzamiento genético que estamos ejecutando desde 2007”.
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