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Viajar más de 1.000 km para estar el 8M en Madrid: “Siempre tengo la necesidad de venir”

“Llevo tres años viviendo en Inglaterra y a la manifestación del 8 de marzo siempre tengo la necesidad de venir porque creo que hay mucho que cambiar”, dice Irene Gene, una maquilladora profesional de 27 años que trabaja en Londres. Aterrizó en Madrid ayer por la noche, como Ana Santamarina, de 25, que está haciendo un doctorado en Glasgow, Escocia. “Me parece muy potente lo que se está organizando aquí y en diversas ciudades y espacios del Estado español”, indica.

“En Londres se va a celebrar el Women’s strike, un movimiento con diferentes talleres, como los que se hacen aquí en España, pero tengo la necesidad de luchar por el feminismo más en mi país”, explica Gene. Esta necesidad surge, dice, de “los últimos anuncios de diferentes partidos políticos, que me hacen daño como persona a mí y, como consecuencia, al resto de mujeres”. En la misma línea se pronuncia Santamarina: “Creo que hay que salir a luchar con todo, sobre todo ahora que se nos echa encima el auge de la extrema derecha, que se está construyendo sobre un discurso machista, xenófobo y asqueroso”.

“Todas a una parece que se ve más”, explica Laura Florentino, que atiende a esta redacción desde el manos libres de su coche, al filo de la una de la tarde. Viaja desde Asturias, se reúne en Astorga con su amiga Elena Ferreras, que vive en Ponferrada, y prevén llegar a Madrid sobre las 16.30 horas. “En Gijón la huelga también está muy bien y se vive intensamente, pero en Madrid el movimiento es más grande y tiene más visibilidad”, dice. “Ahí es donde se concentra todo el mundo y siempre había tenido ganas de vivirlo allí”, comenta Ferreras. También, por la posibilidad “de reunirme con amigas y amigos y de vivirlo todos juntos”, añade.

Gene también asistirá a la manifestación con amigas y compañeras activistas. “Voy con un colectivo LGTBI, que tiene el eslogan de 'stop plumofobia', con mis amigas feministas activistas del Sahara, y con mis amigas feministas de a pie”, comenta. Y con sus hermanas. “En mi familia somos un montón de mujeres”, añade como argumento para celebrar y reivindicar este 8M en casa. “Siempre voy a manifestaciones por los derechos de las personas y los trabajadores. Por supuesto, a las que son por los derechos de las mujeres no he faltado nunca, y no creo que falte”, añade. La del año pasado la recuerda de una forma especial: “Fue súper especial, me emocioné un montón y necesité volver a vivirlo este año”.

El feminismo, “mucho más en el ambiente”

“Yo empecé a ir a estas manifestaciones hace tres años y creo que ahora mismo el movimiento feminista está mucho más en el ambiente. Yo misma veo a mujeres que tenían un pensamiento más tradicional y que este año han hecho huelga”, se alegra Florentino. No obstante, reconoce que “la edad en la que estamos (27 años) es especialmente crítica. Las mujeres accedemos a los estudios, pero luego nos vemos obligadas a cuidar más a la familia o, si tenemos hijos, a no progresar en nuestra carrera laboral. Hasta ahora he visto más el machismo en mi madre y mi abuela, pero ahora me va a afectar a mí”. Su amiga lamenta que en la sociedad “sigue habiendo muchos clichés”. “Desde que soy maestra lo veo más aún. Entre las generaciones que vienen sigue habiendo mucho micro y macromachismo. Eso me da mucha fuerza para seguir poniendo mi granito de arena por la causa”.

En Glasgow se celebran hoy “eventos puntuales y una concentración, pero sin más. Es mucho más minoritario, aunque también es verdad que nosotros tenemos una cultura mucho más de salir a la calle”, indica Santamarina. Ella se manifestará esta tarde “con amigas, con compañeras de la universidad, luego viene mi madre… Nos encontramos todas” porque “las mujeres tenemos un papel muy importante” a la hora de “contestar todas esas políticas que atentan contra nuestros derechos”.

Aunque estas cuatro mujeres se manifestarán en Madrid, donde se prevé la manifestación más numerosa, coinciden en no hacer de menos los actos y manifestaciones que se realizan en otras provincias. Lo verbaliza Santamarina: “Es verdad que Madrid es la más grande, pero creo que hay que visibilizar todos los espacios”. Y así está ocurriendo este viernes.