La presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela Barnes de Carlotto, ha aconsejado hoy a los españoles unirse para “que el franquismo sea condenado”, ya que “un Estado que no reconoce que hubo miles de muertos por el franquismo es un Estado deficiente”.
Así lo ha explicado en una rueda de prensa convocada por la Asociación Mujeres de Guatemala cuyo objetivo es la lucha contra la impunidad y dar voz a destacadas líderes activistas de todo el mundo.
La activista argentina de 84 años ha destacado que “el pueblo tiene que juntarse para luchar desde la paz y exigirle a los que están en el ejecutivo que cumplan con lo que piden los ciudadanos”.
En esta línea de denuncia, Estela de Carlotto ha añadido que “hay que mover la historia, no estancarla y, por supuesto, no hay que olvidarla”, con motivo de los fallecidos durante la dictadura franquista en España.
Por otro lado, ha explicado que “el rol de la mujer está teniendo mucha preponderancia en el mundo” y que el fin que buscan en la asociación es “combatir la desigualdad, la impunidad y todas las acciones repudiables en Latinoamérica bajo mandatos dictatoriales.
En cuanto a la dictadura argentina que comenzó en 1976 ha señalado que “se crearon multitud de campos de detención clandestinos” y hubo miles de secuestros, entre ellos el de su hija Laura, que estaba embarazada y “fue asesinada dos meses después de tener al bebé”.
A raíz de estas desapariciones ordenadas por el dictador argentino Rafael Videla, las Abuelas de la Plaza de Mayo recorrieron el mundo “buscando personas cuyos hijos fueron secuestrados y sus nietos arrebatados por motivos políticos”.
“La Plaza de Mayo se encuentra frente al edificio en el cual residía la gente que conocía el destino de nuestros hijos y nietos” y Estela de Carlotto, así como las personas cuyo destino fue similar se reunían en las inmediaciones de aquella ronda.
Asimismo, ha asegurado que “en los últimos doce años los gobiernos en Argentina han decidido categóricamente poner las cosas en su lugar, reconstruir el derecho humano, el respeto a la vida y castigar a los que cometieron estos actos”.
Hasta 1982, año en el que comenzaron las pruebas genéticas mediante análisis de sangre, las Abuelas de la Plaza de Mayo actuaban como detectives, hacían fotografías y observaban a los niños al salir de las guarderías por si eran sus nietos, “pero no servía de nada”.
En cuanto a su nieto desaparecido, Estela ha recordado que “llevaba 36 años buscándole, soñando con el encuentro”, y en agosto de 2014 pudo ponerle cara y abrazarlo, aunque destacó que no podía ni moverse, porque le “temblaban las piernas por los nervios”.
Según la presidenta de la asociación, la sociedad les acusó de tener nietos guardados “para sacarlos cuando a Cristina Kirchner (presidenta de Argentina) le viniese bien”.
La asociación Abuelas de Plaza de Mayo es una organización argentina que tiene como objetivo encontrar y devolver a sus familias a todos los nietos que desaparecieron durante la última dictadura militar (1976-1983) tras los secuestros de sus padres.