Tres activistas del grupo Femen declaran este lunes ante el Juzgado de Instrucción nº 41 de Madrid por protestar en noviembre del año pasado en un acto de Falange Española con motivo del aniversario de la muerte de Franco. El juez ha admitido a trámite la querella que interpuso Falange en la que acusa a las activistas de delitos de coacciones, desórdenes públicos y contra el ejercicio de los derechos fundamentales.
'Las Femen' irrumpieron pocos minutos antes de que empezara el acto, convocado en la Plaza de Oriente de Madrid el pasado 18 de noviembre para conmemorar el 20N y que tenía por leitmotiv la petición de la derogación de la Ley de Memoria Histórica. Las tres mujeres llevaban escrito en el torso desnudo el lema “fascismo legal, vergüenza nacional” y en la espalda mostraban el escudo preconstitucional tachado con una cruz roja y la frase “Stop 20N”.
Las activistas fueron increpadas por los manifestantes, que portaban banderas de Falange con consignas como “Viva la unidad de España” o “Sánchez desokupa y deja a Franco en paz”, en alusión a los planes del Gobierno para exhumar al dictador del Valle de los Caídos. Dos de las integrantes del colectivo feminista fueron placadas y pateadas, escupidas e insultadas por varios asistentes a la concentración y las imágenes tuvieron repercusión incluso a nivel internacional. “Nos gritaban 'puta' y 'a la hoguera' mientras nos agredían”, aseguró a eldiario.es una de las activistas pocos días después.
El abogado de las participantes en la protesta, Endika Zulueta, asegura que se trató de una acción “pacífica y simbólica” que “no es constitutiva de delito alguno”, por lo que, tras la declaración, la defensa solicitará el archivo de la causa. El juzgado deberá decidir entonces si procede con las diligencias o pone punto y final. “Ellas fueron insultadas y agredidas por diversas personas, debiendo ser protegidas por funcionarios de la Policía Nacional”, que les retiró del acto por su propia seguridad, según contaron ellas mismas posteriormente.
Zulueta apunta a que “la acción apenas duró un minuto y el acto convocado por la Falange comenzó y se desarrolló sin problema alguno”, prosigue. Por su parte, el Juzgado podría abrir diligencias de oficio contra los presuntos autores de las agresiones sufridas por las activistas.