Río de Janeiro, 12 mar (EFE).- El número de indígenas muertos en Brasil por la pandemia superó este viernes el millar, lo que supone que unos tres indígenas fallecen al día por la covid-19, según datos divulgados por la Articulación de los Pueblos Indígenas de Brasil (APIB).
De acuerdo con la organización, ya son 1.001 muertos por el virus que ha afectado a 163 aldeas, donde cerca de 50.500 indígenas se han contagiado desde que la pandemia llegó al país el 26 de febrero de 2020.
Las cifras casi que duplican a las divulgadas por el Gobierno brasileño. Datos de la Secretaría Especial de Salud Indígena (Sesai) señalan que 601 indígenas han muerto por la enfermedad y 44.571 se han contagiado.
Esto se debe a que el Gobierno solo tiene en cuenta los casos de indígenas que viven en aldeas, pero excluye aquellos que habitan en en contextos urbanos.
De acuerdo con el Censo de 2010, en Brasil viven cerca de 900.000 indígenas, de 305 etnias, que representan el 0,47 % de la población total del gigante suramericano. Hace diez años, el número de indígenas viviendo en áreas urbanas era de unos 325.000.
Esto hace que la tasa de letalidad por la covid-19 entre estos pueblos sea de hasta un 7 %, tres veces superior a la que actualmente se registra con el resto de la población brasileña (2,4 %), considerada una de las más altas del mundo.
Entre los factores que hacen tan alta esa tasa están el tener un sistema inmune más frágil, no contar con fácil acceso a los servicios de salud y las invasiones que suelen realizar en sus territorios mineros ilegales y comerciantes de madera que llevan consigo el virus a sus aldeas, además de devastar la selva.
Por esta razón, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) desde julio del año pasado y hasta diciembre ha concedido gradualmente tres medidas cautelares a favor de los pueblos indígenas Yanomami, Ye'kwana, Munduruku, Guajajara y Awá, una situación que fue informada este viernes a la Corte Suprema de Justicia en Brasil, pues la situación continúa crítica en los territorios indígenas.
De acuerdo con la CIDH, los pueblos indígenas viven en una “situación de riesgo” frente a la pandemia, por su “particular susceptibilidad” a enfermedades respiratorias y que los contagios crecen “rápidamente” en sus territorios por el “deficiente” sistema de salud y la presencia de terceros no autorizados en sus territorios, “favoreciendo el flujo del virus”.
Según la APIB, fue necesario informar sobre las cautelas de la CIDH a la Corte Suprema, luego de que las invasiones a las tierras indígenas por terceros y las dificultades para acceder al sistema de salud persisten en varias aldeas del país, pese a que ya el mismo Tribunal había ordenado desde el año pasado al Gobierno nacional adoptar medidas para contener la pandemia en esos pueblos.
La primera muerte indígena en el país se registró el 20 de marzo del año pasado.
Con 240 fallecidos, Amazonas es el estado con mayor número de muertes, seguido de Mato Grosso (153), Mato Grosso do Sul (107) y Pará (101).
Brasil ya vacunó contra la covid-19 al 66 % de los 410.000 indígenas adultos que viven en aldeas, principalmente en la Amazonía, considerados prioritarios en la campaña de inmunización por ser uno de los grupos más vulnerables a la pandemia, informó este viernes el Ministerio de Salud.
El gigante latinoamericano, epicentro global de la pandemia en la actualidad, suma más de 275.000 muertes y 11,3 millones de contagios por el coronavirus SARS-CoV-2.
Con más de 210 millones de habitantes, Brasil solo ha vacunado a un 4 % de la población total, por la falta de dosis listas de inmunizantes en el país.