Habrá que esperar al partido de vuelta para decidir sobre la vacunación de la Selección española masculina de fútbol. El Ministerio de Sanidad había llevado la cuestión de la vacunación prioritaria del equipo a la Comisión de Salud Pública, tras una petición del Ministerio de Cultura y Deportes a instancias de la Real Federación Española de Fútbol. Pero el órgano, que está formado por directores de Salud Pública de todas las comunidades y del Ministerio, no se ha pronunciado sobre el tema, confirma Sanidad a elDiario.es.
La reunión se ha producido a menos de una semana de que la Selección debute oficialmente en la Eurocopa, el próximo lunes. Sanidad ha incluido la cuestión en el orden del día de la reunión del Consejo Interterritorial de Salud de este miércoles, que reúne a la ministra de Sanidad y los consejeros de Sanidad autonómicos, donde se tomará la decisión definitiva.
La vacunación en España se plantea por edades, ya que la edad avanzada se considera el factor de mayor riesgo, y los jugadores de la Selección son todos menores de 40 años, por tanto, no les tocaría todavía. Tampoco pertenecen a ningún colectivo de los que se ha considerado prioritarios, el otro criterio por el que podrían haber sido vacunados si no cumplen el de la edad. De aprobarse su inmunización, se trataría de una excepción. Se ha valorado, según explican en Sanidad, de la misma manera que se valoró vacunar a los deportistas que van a los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Tokyo. Aunque en esa ocasión se preparó con “más antelación”, y su vacunación se anunció a principios de mayo.
La UEFA, organizadora de la Eurocopa, no obliga a los países a que sus selecciones estén vacunadas para el torneo. El Comité Olímpico Internacional tampoco, pero, tras un acuerdo con Pfizer/BioNTech, puso sus propias dosis a disposición de los deportistas. En el caso de la Selección, que contaba 24 convocados de los que se cayó el jugador infectado Sergio Busquets, serían vacunados con dosis que pertenecen a España. Según la página del Ministerio de Sanidad sobre vacunas, todas las vacunas hacen efecto pasados al menos 7 días de la inoculación de la segunda dosis. Por tanto, incluso aunque se les hubiese puesto este mismo martes, los jugadores no debutarían el próximo lunes completamente protegidos frente a la COVID-19 grave, aunque la primera dosis sí otorga cierta inmunidad. Está demostrado, además, que las vacunas previenen pasar la infección de manera aguda, pero no el contagio, así que no evitan las cuarentenas preventivas si se ha tenido un contacto. En un principio, se pidió que a los jugadores se les pusiera Janssen, pero por ahora no está indicada para su edad, así que esa opción quedaba en principio descartada.
El Ministerio de Cultura y Deportes remitió una carta con la petición que el de Sanidad recibió el pasado viernes. La noticia trascendió ayer lunes, después del positivo por COVID-19 del capitán del equipo, Sergio Busquets, que ha obligado a replantear algunos planes de la competición, porque algunos de sus compañeros son contactos estrechos. El equipo viaja además en “burbuja”, y la inyección no anularía la cuarentena que deberían hacer si hay positivos. En estos momentos, también está compitiendo a nivel europeo la Selección femenina de hockey hierba, y en dos semanas también competirá en el Europeo de Baloncesto la Selección femenina española. Cultura señala a este periódico que tienen muchas peticiones desde muchas otras federaciones, pero por ahora solo entran los olímpicos y la Selección.
El ministro de Cultura y Deportes, José Manuel Rodríguez Uribes, ha justificado este martes en la Cadena SER esta postura. “Lo hemos hecho porque entendemos que nos representan y que el conjunto del país entiende que vayan en las mejores condiciones para competir al máximo”, declaraba. El director del Centro de Coordinación y Alertas Sanitarias, Fernando Simón, decía ayer en rueda de prensa que en la campaña hay que “valorar” muchos factores y este “no es un partido cualquiera y se mueven muchos intereses”. Entre los partidos políticos, no ha habido consenso: En Comú Podem y Compromís lo han criticado, Más País se ha mostrado a favor, y el PP ha comentado que se ha preparado con poco tiempo.
En España, la vacunación frente a la COVID-19 es por edades, de mayores a menores. Ya tienen una dosis casi el 100% de los mayores de 60, la pauta completa cerca del 100% de los de 70 y más del 50% de los de 50. Las comunidades comienzan ahora con la franja 40-50, aunque no está completa la 50-60. “La principal prioridad de la Estrategia es extender la vacunación e ir vacunando de manera progresiva a las cohortes descendentes de edad con más riesgo de hospitalización, ingreso en la UCI y muerte”, porque es la edad el mayor factor de riesgo de sufrir la enfermedad, se lee en la estrategia de vacunación nacional, que actualizan el Ministerio, las comunidades y expertos externos. Los profesionales de enfermería han marcado récords estos últimos días, llegando a poner más de 460.000 pinchazos cada 24 horas.
Se han hecho excepciones con los olímpicos y los paralímpicos, y con los trabajadores sociosanitarios, que fueron los primeros junto a los usuarios de residencias en recibir dosis, en enero; con algunos trabajadores esenciales (docentes, militares, policías, bomberos) menores de 60 años, cuando por motivos de seguridad se decidió no vacunar a mayores de 60 con AstraZeneca/Oxford; y con unas 300.000 personas con patologías de mucho riesgo.