Cerca de una treintena de familias sin recursos han sido desalojadas esta mañana de dos bloques vacíos propiedad de una empresa multada por el Ayuntamiento de Majadahonda por saltarse la ley. Un amplio dispositivo formado por Policía Municipal y Guardia Civil ha acordonado la zona desde muy temprano y ha impedido el paso de las personas que iban llegando al lugar para apoyar a los vecinos, que entraron en las casas conocidas como 'Las casas rojas' en 2009. Tras tres intentos de desahucio, este lunes ha sido el definitivo.
Las familias han resistido pero finalmente han decidido salir de los inmuebles sin que se hayan producido enfrentamientos con los agentes. Según la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, los vecinos han solicitado en varias ocasiones a la empresa la regularización de su situación sin obtener respuesta. “Pedimos a los propietarios que nos dejen quedarnos pagándoles un alquiler social. No queremos vivir por la cara”, decía hace unos días Diego Fernández, uno de los inquilinos. Al lugar han acudido un nutrido número de políticos y activistas, entre ellos el diputado Rafael Mayoral (Unidos Podemos) y la portavoz de IU Madrid Sol Sánchez.
Una multa de 600.000 euros pendiente
Los pisos se levantaron a principios de los 2000. El Ayuntamiento de Majadahonda, localidad madrileña donde se ubican y que concedió la licencia de obras en 1998, multó a la constructora propietaria con 600.000 euros por sobrepasar el número máximo de alturas fijado por el Plan de Urbanismo de la localidad, una infracción grave contemplada en ley del Suelo de la Comunidad de Madrid de 2001. La empresa pidió que una revisión en 2013 de la multa, que fue inadmitida, según consta en las actas del Pleno del Ayuntamiento.
Actualmente las 20 viviendas no tienen por este motivo licencia de “primera ocupación” ni suministros de agua, luz o gas, aunque los vecinos han colocado unas placas solares para autoabastecerse.
La PAH asegura que pidió hace meses una reunión a la Comunidad de Madrid para acordar una solución para las familias que nunca recibió respuesta. El Ayuntamiento de Majadahonda no ofrece, según los activistas, una alternativa habitacional a los vecinos más que unas noches de hotel para los niños y niñas y ancianos. Para el resto, aseguran, van a habilitar una carpa. eldiario.es se ha puesto en contacto sin éxito con el consistorio para recabar su versión.