El Gobierno ha puesto en marcha un paquete de medidas para reforzar la atención a las víctimas de violencia machista durante el confinamiento impuesto para frenar el contagio de coronavirus. Entre ellas, un nuevo recurso para casos de emergencia y otro de asistencia psicológica. El primero servirá para que las mujeres puedan dar la voz de alarma desde sus domicilios mediante un mensaje de Whatsapp que recibirán las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. El objetivo es sortear las dificultades que pueden encontrarse muchas víctimas para llamar al teléfono 016 mientras comparten espacio con sus agresores.
Según ha informado el ministerio de Igualdad, en los próximos días también estará disponible un sistema de mensajería instantánea “de contención y asistencia psicológica” para estas víctimas, que gestionará la Administración Central. El impulso de este plan responde a un contexto marcado por el aislamiento domiciliario, que puede conducir a muchas mujeres a “ver dificultado o imposibilitado el acceso a los medios habituales de comunicación y denuncia en situaciones de violencia de género”, explica el ministerio en una nota de prensa.
Las medidas incluyen también declarar los servicios de asistencia integral a las víctimas como servicios esenciales, lo que implicará que el Estado debe garantizar el funcionamiento de los mismos. En concreto, de los dispositivos de información 24 horas, los recursos de emergencia y acogida, los pisos tutelados y alojamientos seguros para víctimas de explotación sexual y trata de mujeres y niñas con fines de explotación sexual y también los servicios de asistencia psicológica, jurídica y social de manera no presencial (telefónica o por otros canales).
El Ministerio de Igualdad también ha anunciado que pondrá en marcha una campaña específica para presentar el plan y centrada en la situación de emergencia que vive el país. Entre sus ejes estarán “la concienciación contra la violencia de género” y “por el buen trato” durante el periodo de reclusión y la alerta de las situaciones que pueden darse dentro de los hogares en contextos de este tipo.
Como ya anunciara el propio ministerio este lunes, la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género ha requerido a las comunidades autónomas para que hagan una actualización de qué servicios y recursos de atención y acompañamiento permanecen operativos tras las medidas restrictivas impuestas por los gobiernos. Este estudio será remitido al teléfono 016 para que no derive a ninguna mujer a centros que pueden estar cerrados. Además, el Gobierno ha modificado los contratos de los servicios estatales para que las empleadas del 016 y del centro que hace el seguimiento de las pulseras impuestas a hombres investigados puedan teletrabajar.