El Gobierno redobla la presión sobre Luis Rubiales tras el beso que dio a la futbolista Jenni Hermoso sin consentimiento. La ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico en funciones, Teresa Ribera, ha tildado este jueves de “humillante y vergonzoso” el trato del presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF) con las jugadoras, mientras el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, asegura que el Ejecutivo actuará si no se toman medidas por parte de la RFEF.
“Desde el Gobierno estamos siguiendo muy de cerca este hecho porque las cosas no pueden quedar así. Desde luego esperamos acontecimientos, pero si no se dan, si no se producen, el Gobierno va a actuar”, ha dicho Félix Bolaños durante una visita oficial a París.
El ministro de la Presidencia considera “esencial que seamos conscientes del cambio de la sociedad española en estos últimos años. A la sociedad española ya le parece intolerable que haya comportamientos machistas, que se bese a una mujer sin su consentimiento”.
Por su parte, Teresa Ribera ha dicho durante una visita a Tenerife que el Gobierno es “cauto y respetuoso” con el proceso porque “no depende directamente” de sus competencias –queda a expensas de la Federación y el Consejo Superior de Deportes– pero ha insistido en que la actitud de Rubiales tiene un tono “enormemente sospechoso y humillante”.
“Imágenes vergonzosas”
“Cada vez aparecen más imágenes vergonzosas de la relación que tiene con las jugadoras, que dista de la que tiene con los jugadores. Es enormemente sospechoso, humillante y vergonzoso”, ha dicho la vicepresidenta.
Ribera ve “obvio” que el comportamiento de Rubiales es “claramente inadecuado” y se ha preguntado si el presidente “considera que está en condiciones de seguir ejerciendo su responsabilidad con dignidad” a raíz “de lo que ha hecho” y de las imágenes que se van conociendo. “Lo hemos visto todos, no es algo discutido por nadie”, ha agregado.
La palabras de la vicepresidenta se suman a las críticas realizadas por otros miembros del Gobierno, desde el propio presidente Pedro Sánchez, quien consideró insuficientes las excusas de Rubiales y lo emplazó a “dar más pasos”, hasta las críticas más explícitas del ministro de Deporte, Miquel Iceta, de la vicepresidenta Yolanda Díaz y las ministras de Igualdad, Irene Montero, y de Derechos Sociales, Ione Belarra.
Este jueves, además, se ha pronunciado el entrenador del Real Madrid, Carlo Ancelotti. El técnico blanco ha dicho que “como ciudadano” no le gustó el comportamiento de Rubiales y ha señalado que no le parece propio de su cargo, aunque no ha querido posicionarse sobre si debería dimitir.